McDonald’s se instala en una incubadora digital en Silicon Valley

La última innovación de McDonal’s no es una hamburguesa, es un producto digital. La compañía se ha instalado en el 658 de Market Street y ha contratado a varios ingenieros de PayPal, Facebook, AOL y Yahoo!, y todavía le quedan 20 puestos vacantes. 

Al igual que Starbucks y algunos otros restaurantes de comida rápida, la compañía ya admite pago digital en sus establecimientos de Estados Unidos. Además con la fiebre del Mundial, ha desarrollado una aplicación de realidad aumentada para su packaging de patatas fritas.

Esta nueva «avanzadilla» digital nace del celebro de Atif Rafiq, un antiguo trabajador de Amazon que se unió el pasado otoño a las filas de McDonald’s para intentar motivar a su público más joven y digital.

Según un portavoz de la hamburguesería, este movimiento estratégico hacia Silicon Valley está motivado para conseguir «una presencia en el corazón de la comunidad tecnológica que nos permita atraer talento a nivel mundial. Estar en este epicentro también nos ayudará a establecer relaciones claves dentro del espacio digital»

El traslado a Market Street es parte de una tendencia dentro de algunos «gigantes tecnológicos». Compañías como Twitter, Yammer o Square, se han trasladado a esta zona en un intento de rehabilitarla, ya que ahora mismo consiste en una extraña mezcla de mendigos e indigentes con nuevos ricos de la escena tecnológica.

Lo que no está claro es en que están trabajando ahora mismo los nuevos programadores de McDonald’s, pero, como apuntan en TechCrunch, este es un indicio más de como la tecnología ha penetrado en nuestra cultura, hasta llegar «a una patata frita».