Steve Ballmer se va de compras

Cuando Steve Ballmer dejó de ser CEO de Microsoft y anunció que se había comprado un equipo de baloncesto de la NBA, muchos pensamos que desaparecería de la primera línea del mundo de la tecnología. Pero parece que no va a ser así. Poco más de año y medio después de dejar las riendas de Microsoft, Ballmer acaba de regresar a la primera línea del mundo IT con la confirmación de la compra de un 4% de las acciones de una compañía que ha generado toneladas de titulares en las últimas semanas: Twitter.

Ballmer, que ha invertido 800 millones de dólares en la compañía, se convierte así en el tercer mayor accionista individual de la red social. Incluso tiene más acciones que su CEO, Jack Dorsey, que posee un tres por ciento. Sólo lo sobrepasan uno de los fundadores de Twitter, Evan Williams, que cuenta con un 6,8%, y un príncipe saudí llamado Alwaleed Bin Talal. Este tiene, a título individual, cerca del 4,5% de las acciones de la compañía, mientras que controla otro 0,75% de las mismas a través de uno de sus brazos inversores, Kingdom Holding. La compra de este último porcentaje de acciones la realizó apenas un par de días después de que Jack Dorsey fuese confirmado como CEO definitivo de Twitter.

Ballmer ha confirmado la noticia, cÓmo no, a través de su cuenta de Twitter. En sus mensajes, el ex de Microsoft no sólo habla de la compra de acciones que ha ido realizando a lo largo de los pasados meses, sino que también se felicita a sí mismo y a Alwaleed Bin Talal por invertir en la red social. Además, alaba el nombramiento de Dorsey como CEO definitivo de la empresa y se alegra del lanzamiento de Moments, una función que muestra en tiempo real los tuits que se están emitiendo en relación con un evento destacado.

Sin duda, la confirmación de la inversión de Steve Ballmer (y de rebote, la de Bin Talal) es una buena noticia para Twitter, que la semana pasada anunció el despido del 8 por ciento de su plantilla, además de nombrar Presidente de su Consejo de Administración a Omid Kordestani, un antiguo directivo de Google. Y parece que por lo menos, los inversores han recibido la noticia con agrado, puesto que el precio de las acciones subió cerca de un 5% tras conocerse la noticia.