Fabrican un cristal que pasa de transparente a opaco en menos de un segundo

¿Imaginas una ventana con cristales que pasasen de ser transparentes a opacos con rapidez y sólo con pulsar un botón o accionar un interruptor? Pues varios científicos han desarrollado, precisamente, un cristal que pierde su transparencia en menos de un segundo. Se trataría de una nueva forma de fabricar un material que ya se creó de forma experimental a base de nanocristales y nanoestructuras metálicas. Las diferencial fundamentales con la estructura de ahora es que es menos costoso y complicado de crear, lo que facilitaría su fabricación de forma masiva.

Así, los investigadores responsables del descubrimiento, que según Cnet son dos profesores de la Escuela de Ingeniería y Ciencias Aplicadas John A. Paulson de la Universidad de Harvard, sostienen que el método que han utilizado en la creación de este cristal es muchísimo más económico, lo que permitiría fabricarlo de forma efectiva.

El sistema, descrito en un estudio publicado en la revista Optics Letters, se basa en una capa de cristal colocada en medio de dos hojas de elastómero suave y transparente, que cuentan con un recubrimiento compuesto por una red de nanocables de plata. Esto es, precisamente, lo que hace que su fabricación sea tan económica. Otros sistemas anteriores de creación de este tipo de cristal para ventanas se creaban por medio de una técnica denominada Precipitado de Vacío, mediante la que se depositan capas moleculares de materiales sobre el cristal.

Pero con el nuevo sistema, al producirse el cambio de transparente a opaco en base a un fenómeno físico en lugar de mediante una reacción química, la fabricación será tan barata que se podrán producir cristales para ventanas que se opaquen o aclaren casi al instante. Todo gracias a los nanocables, que son demasiado pequeños para absorber la luz y convertirse por si solos en visibles para los humanos.

Pero al aplicar una corriente eléctrica en una ventana, los nanocables se moverán y se colocarán unos junto a otros. Como consecuencia, la hoja de elastomero se deformará de tal manera que dispersará la luz, y oscurecerá la superficie. Se oscurecerá más cuanto más fuerte sea la corriente eléctrica aplicada.

Por el momento, la universidad ya ha solicitado la patente de la tecnología, y los profesores que han dado con ella, Clarke y Shian, ya están trabajando en el desarrollo de capas de elastomero todavía más finas que las que han utilizado hasta ahora en la creación de este cristal. ¿Su objetivo? reducir con ello el voltaje necesario para convertir el cristal en opaco.