BlackBerry DTEK50, ¿última oportunidad?

Queda lejos (no tanto en el tiempo como en los números) el esplendor de Blackberry, otrora líder del segmento profesional de la telefonía móvil con su, entonces, revolucionario sistemas de correo electrónico. La llegada de los smartphones, sumana a una torpe y lenta reacción por parte de la empresa canadiense, acabó con su reinado y ha hecho que, desde hace años, su futuro esté en entredicho. Su último intento, y quién sabe si su última oportunidad tiene un nombre, BlackBerry DTEK50, y aunque conserva parte de la esencia de la marca, renuncia a otros elementos que, hasta ahora, han sido fundamentales en sus dispositivos, tal y como destaca hoy The Wall Street Journal.

Lo primero a destacar es que, al igual que su predecesor, BlackBerry Priv, DTEK5 es un dispositivo basado en Android. Pero, como principal diferencia, encontramos el precio, ya que frente a los 500 dólares por los que salió a la venta Priv, DTEK5 baja hasta los 300, entrando de lleno en el segmento de los terminales Android de gama media, un mercado que goza de bastante movimiento, pero en el que tendrá que competir con empresas que ya llevan años en el mismo y que cuentan con imágenes de marca ya muy consolidadas.

La principal baza que pretende jugar BlackBerry es la de la seguridad. Lo más destacable a este respecto es todo el contenido del dispositivo se almacena cifrado, como ya ofrecen gran parte de los terminales de gama alta. Con esta medida de seguridad, aunque el dispositivo caiga en malas manos, su contenido no será accesible. Además, cuenta con funciones de seguridad a nivel de chip, con un integrado responsable de verificar que el sistema operativo del teléfono no ha sido manipulado (mediante software) con aviesas intenciones. Si el sistema de seguridad detecta que la versión de Android ha sufrido modificaciones, no será posible iniciar el teléfono. Además, también cuenta con una app que permite, de manera centralizada, comprobar los permisos concedidos a cada app instalada, lo que permite detectar rápidamente si hay algún programa que tenga autorización para acceder a contenidos que no debería «ver».

También relacionado con la seguridad, se ha mejorado ostensiblemente el tiempo que transcurre desde que Google publica una nueva versión de Android, y esta pasa a estar disponible para los usuarios de BlackBerry. Tras el incomprensible retraso de Android 6.0 Marshmallow (pasaron cinco meses desde su publicación por Google hasta que estuvo disponible para Priv), la empresa canadiense afirma haber estado trabajando de manera conjunta para que las actualizaciones del sistema operativo lleguen de manera mucho más rápida a sus usuarios, tanto de Priv como de DTEK5.

Otro aspecto en el que siempre ha destacado la oferta de BlackBerry es el de la productividad. DTEK5 cuenta con una pantalla personalizable de accesos rápidos a la tareas más comunes, la app BlackBerry Hub que centraliza todas las comunicaciones del usuario en un único espacio y un botón personalizable en su lateral derecho, que el usuario puede configurar como acceso rápido a la función que emplee de manera más habitual. Además, al tratarse de un terminal Android, cuenta con el bastísimo ecosistema de apps de productividad de Google Play.

¿Y qué no tiene DTEK5 con respecto a anteriores dispositivos de BlackBerry? Pues hay elemento que destaca por encima de todo lo demás: el teclado. Es cierto que no se trata del primer teléfono del fabricante canadiense que recurre al teclado en pantalla (ya lo hacía, por ejemplo, la exitosa BlackBerry Storm), y también que no siempre ha contado con un teclado qwerty (recordemos la BlackBerry Pearl). Sin embargo, parece que habían vuelto a poner en valor la importancia de un teclado físico en sus dispositivos, por lo que este cambio sorprende un poco.

Pero, claro, ahora más que nunca tienen que realizar todo tipo de pruebas, siempre que las hayan sometido a cierto análisis previamente. BlackBerry tiene que reinventarse si no quiere terminar por desaparecer y, aunque hasta ahora no ha tenido demasiado éxito, es indudable que lo están intentando. ¿Es un smartphone Android de gama media y con algunas medidas extra de seguridad el mejor camino? No lo sé pero, sin duda, sí que me parece algo mucho más acertado que pretender seguir haciendo lo mismo que hace diez años, en un sector (el de la telefonía móvil) que se mueve a una velocidad que en ocasiones puede llegar a marear.

Imagen: Blackberry