Microsoft y sus smartphones: otra vuelta más

Desde que compró la división de dispositivos móviles de Nokia, esto es, la mayor parte de la compañía finlandesa, hace algo más de dos años, Microsoft parece no terminar de dar con el rumbo correcto para los teléfonos que «heredó» con la operación: los smartphones que cuando llegaron a manos de los de Redmond formaban parte de la gama Nokia Lumia.

Como ahora, estos móviles llevaban el sistema operativo Windows Phone, aunque la compañía había empezado a dar tímidos pasos hacia la integración de Android en sus terminales, unos planes que dentro de Microsoft duraron más bien poco tiempo. Los directivos se pusieron pronto manos a la obra para tratar de hacer que los móviles de Nokia remontasen. Muchos de sus esfuerzos pasaban por una reorganización de sus líneas y por un cambio en su nombre, que en principio hiciese desaparecer el legendario nombre Nokia de los terminales. Así, en septiembre de 2014, los smartphones de Microsoft con Windows dejaron oficialmente de denominarse Nokia Lumia para pasar a ser únicamente miembros de la familia Lumia.

También desapareció de ellos Windows Phone para dejar paso a la siguiente versión de Windows para móviles, Windows 10 Mobile, con el objetivo de mejorar el atractivo de los móviles a ojos de usuarios y desarrolladores, puesto que las ediciones para móviles de Windows nunca han resultado lo suficientemente atrayentes para empresas y creadores de apps, lo que ha provocado que siempre se ha quedado atrás en cuanto a número de aplicaciones, si lo comparamos con sus rivales, iOS y Android.

Pero siguieron sin conseguirlo, y Microsoft tuvo que rebajar sus expectativas en el área de smartphones, y también despedir a numerosos empleados ante la cada vez más acusada caída en ventas y descenso de cuota de mercado. Llegados a este punto, los de Redmond sigue sin tener claro qué hacer para remontar el vuelo en este mercado. Según varias hipótesis, lo que sus responsables están barajando, después de rebajar sus precios progresivamente en los últimos meses, pasa por la desaparición de la gama Lumia, que en la actualidad solo está compuesta por cuatro modelos, y el lanzamiento de un smartphone dentro de la gama Surface, destinado sobre todo a profesionales.

Según recogen nuestros compañeros de MuyCanal, los planes de Microsoft pasan por dejar de vender los smartphones Lumia a lo largo del próximo mes de diciembre, lo que demuestra que han llegado a la conclusión de que un lavado de imagen a la marca no es ya bastante para hacer que sus ventas suban. En su lugar, es más que probable que hayan apostado por crear un nuevo teléfono de cero y bajo el paraguas de Surface. No hay nada seguro sobre su lanzamiento, aunque es posible que la compañía pueda anunciarlo en el marco de un evento que tiene previsto celebrar en octubre para presentar un nuevo all-in-one de Surface. Habrá que esperar por tanto todavía un poco más para estar seguros de los planes de los de Redmond en telefonía móvil.