Las primeras dos semanas de Trump y el sector tecnológico

Ya han pasado dos semanas desde que, finalmente, Donald Trump jurará su cargo presidencial y no ha parado de dar titulares, parte a golpe de órdenes ejecutivas, otros tantos a base de tweets, que al parecer sigue siendo su herramienta preferida para comunicarse con el mundo. No obstante, y a diferencia de lo que ocurría cuando todavía era presidente electo, ahora ya no hablamos solo de declaraciones, sino de acciones que, en este momento, ya tienen una incidencia muy directa en la sociedad y, como observamos hoy aquí, en el sector tecnológico.

Sin duda, la medida que más respuesta ha obtenido ha sido la prohibición de acceso a territorio nacional a los ciudadanos de siete países islamistas, en un procedimiento «exprés». Esta medida ha provocado una enorme respuesta popular, que incluso ha enfrentado a Donald Trump con algunas de las principales empresas tecnológicas, que suelen contratar a personas de todo el mundo, ya que priman el talento a la nacionalidad. Pero, además, ha extendido la sombra de «colaboracionistas» con la administración, a las empresas cuyos directivos aceptaron participar como asesores en el equipo formado tras la reunión de Trump con líderes del sector.

Uno de los más afectados por esta situación ha sido, sin duda, Travis Kalanick, CEO de Uber, y que ya ha vivido movimiento internos, como el duro email de su CTO, en el que se le ha señalado y, por extensión, a su empresa, como colaboradora de Trump. Sin embargo, esto ha llegado a su fin pues, según informa Cnet, el ejecutivo ha anunciado que abandona el grupo asesor, además de mostrarse particularmente en contra de las medidas adoptadas por Trump con respecto a la inmigración. De momento no se han producido más bajas en esa lista, pero el grueso del sector tecnológico se ha expresado en contra y muy preocupado por estas medidas, y no descartan tomar medidas para combatir las acciones del presidente.

Pero no todo son malas noticias para Donald Trump a este respecto. El multimillonario presidente se ha encontrado con una inesperada sorpresa que, curiosamente, proviene del extranjero, concretamente de Corea del Sur. Y es que Samsung ha anunciado que está estudiando la posibilidad de abrir una fábrica de electrodomésticos inteligentes en Estados Unidos. El presidente no ha dudado ni un minutos en celebrar la buena noticia (en Twitter, desde luego), tal y como informa hoy Cnet. Lo cierto es que el estadounidense es un mercado primordial para Samsung, por lo que tiene sentido que se plantee la puesta en marcha de dicha factoría que, no obstante, Trump tardará poco tiempo en atribuirse como mérito propio, si finalmente la multinacional lleva sus planes a fin.