Disney competirá con Netflix gracias a la compra de Fox

Hace apenas unas horas que Disney ha confirmado, tras semanas de rumores, la compra de la mayoría de activos de Twenty-First Century Fox por nada menos que 54.200 millones de dólares en acciones. Para la mayoría está claro que esta operación se debe a su interés en el lanzamiento de un servicio de contenidos por streaming que compita con Netflix y otras plataformas. Con esta compra el grupo contará con activos multimedia clave para poder engordar su cartera de contenidos, así como hacerse con elementos que le permitirán más músculo a la hora de rodar, como estudios de cine. Además, también se ha hecho con activos de entretenimiento por cable.

En concreto, lo que ha adquirido Disney es un paquete compuesto por, entre otros, los estudios de la Fox, las cadenas National Geographic y FX, el operador de TV de pago asiático Star TV y varias cadenas de deportes regionales. También se ha hecho con participaciones en Sky, Hulu y el Grupo Endemol Shine. Bob Iger seguirá siendo el presidente y CEO de Disney hasta finales de 2021, tal como han pedido las juntas directivas de ambas empresas. Mientras el CEO de Fox, James Murdoch, ayudará a Disney en el proceso de transición que seguirá a la compra. Pero no tiene asegurado un papel en la empresa resultante de la fusión de las dos tras el proceso.

El más que probable aumento del catálogo del futuro servicio de streaming de Disney, que tiene prevista su llegada para 2019, hace que la amenaza de Disney a Netflix aumente. Tal como lo ve el analista de eMarketer Paul Verna, «cuando más contenido atractivo tengan, mejor podrán competir en la venta de suscripciones, en un punto en el que hay mucha competencia entre los servicios basados en suscripciones«. Por ahora se desconoce el precio que tendrá el servicio de streaming de películas y series de Disney, pero la empresa ya ha confirmado que será notablemente más bajo que el de Netflix. Eso sí, su catálogo tamibén será más pequeño e incluirá varios títulos míticos para los amantes del cine, como las películas de Marvel y Star Wars. A estos se le añaden ahora series y películas de Fox tan icónicas como Los Simpson, Family Guy, Expediente X; o las franquicias de X.Men y Alien. Iger es consciente de que no van a alcanzar el tamaño de Netflix rápidamente. Tampoco lo espera. Eso sí, tiene la intención de que su servicio de streaming se convierta en uno de sus principales competidores.

Mientras, este acuerdo hace que Netflix quede en una situación más problemática que antes porque puede que pierda todavía más contenidos de su catálogo (los de Fox). Por lo tanto, tendrá que invertir más dinero para seguir siendo competitiva. Por suerte para ellos, hace tiempo que se dieron cuenta de que no podrían depender de los contenidos de terceros y se están centrando en desarrollar sus propios contenidos. Para ello, sólo en 2018 tienen previsto invertir 8.000 millones. Para Verna, la estrategia de apostar por la producción propia de Netflix fue la mas acertada. Y dado que su servicio ya está consolidado, Disney tiene por delante una larga pelea para llegar a competir con la plataforma. Además, tampoco está claro de cuántos de los títulos de Fox conseguirá Disney los derechos, ni se sabe si el acuerdo superará el escrutinio de los organismos reguladores correspondientes.