Los 5 errores que hacen que tu currículum sea rechazado en Google de inmediato

Laszlo Bock fue entre 2006 y 2016 Vicepresidente encargado de relaciones personales de Google, y entre sus atribuciones estaba la selección de candidatos a entrar en la compañía. Según aseguró en un post en su perfil de LinkedIn que ha recogido Inc, en Google se pueden llegar a recibir nada menos que 50.000 currículum en una semana. Una cantidad imposible de manejar sin establecer criterios que, de entrada, eliminen candidatos automáticamente para reducir su número hasta una cantidad más o menos manejable. Y Bock, que a lo largo de su vida laboral ha revisado unos 20.000 currículum, tiene claro los cinco fallos que hacen que un currículum sea descartado de inmediato.

El primero son las faltas de ortografía, así como las incorrecciones gramaticales. Puede parecer una obviedad que hay que revisar el currículum antes de enviarlos, pero parece que no todos lo hacen. Según una encuesta realizada por CareerBuilder, el 58% los tenían. Y en este tipo de documentos son fatales, puesto que en los departamentos de Recursos humanos se interpretan como una falta de orientación a los detalles o a una falta de preocupación por la calidad.

Otro de los errores que hacen que en Google descarten un currículum es su longitud. Si es demasiado largo, no lo tienen en cuenta. Para Bock, una normal útil para escribir un currículum con la extensión adecuada es que ocupe una página por cada 10 años de experiencia laboral. De esta manera, además de reducir el esfuerzo que quien va a examinarlo, se muestran las capacidades para sintetizar y priorizar que tiene una persona.

Un formateo incorrecto del currículum también hace que en Google se rechace sin contemplaciones. Bock aconseja diseñarlo de manera que sea claro y legible. Para ello, apuesta por que tenga un tamaño de letra de 10 o superior, con márgenes de al menos 1,25 centímetros. También pide que sea sencillo, escrito en un papel blanco y con tinta negra, que mantenga el mismo interlineado y que cuente con columnas alineadas. También recomienda que el nombre y los datos de contacto figuren en todas las páginas. Además, recomienda revisarlo en varias apps para comprobar que se ve bien, y guardarlo en PDF para evitar perder detalles, o que se mueva el formateo de la información.

Según una auditoría que hicieron en Google mientras Bock trabajó allí, descubrieron que entre un 5% y un 10% de los currículum que recibían desvelaban información confidencial sobre una o varias de las empresas en las que trabajaba o había trabajado el candidato. Por ejemplo, nombres de clientes. Esto sucede cuando para respetar una cláusula de confidencialidad, el demandante de empleo incluye en su currículum mensajes como «trabajó como consultor para una gran empresa de Internet con sede en Menlo Park». No dice su nombre, pero con los datos que da ya se sabe que se trata de Facebook. Cuando en Google encuentran un currículum con este tipo de información velada, lo descartan.

Las mentiras son otro de los principales motivos de rechazo de un currículum en Google, aunque es muy probable que también lo sea en otras compañías. Muchos mienten sobre sus títulos de grado o master, o el lugar en el que cursaron sus estudios. También sobre los puestos que ocuparon en una empresa, o sobre el tiempo que trabajaron en ella. Pero esto trae problemas. El primero es que pueden pillar con facilitad, y el segundo es que las mentiras te perseguirán. Si se descubren una vez que estás en una empresa, lo más normal es que te despidan. Y explicarlo en la siguiente entrevista no es sencillo. Son todos errores que se pueden evitar con facilidad, por lo que cuidar estos aspectos ayuda a superar un primer filtro.

Foto: Buyalex