El Gobierno apoyará con 5 millones de euros al sector del desarrollo de videojuegos en España

El sector de los videojuegos en España crece a buen ritmo. Tanto, que España ya ocupa el cuarto puesto en desarrollo de videojuegos en Europa. También es el octavo país del mundo en el que este área consigue mayores ingresos. Y parece que el Gobierno quiere ofrecerle su apoyo. Así ha quedado de manifiesto a raíz de la convocatoria publicada en el último Boletín Oficial del Estado. En él figura una convocatoria en la que se anuncian ayudas destinadas al sector del videojuego «con el objetivo de promover el emprendimiento y la consolidación de las empresas en este sector«.

Estas ayudas, que alcanzan un total de cinco millones de euros, está financiadas con cargo a los fondos FEDER, los Fondos Europeos de Desarrollo Regional del periodo comprendido entre los años 2014 y 2020. Y el importe que se dará a cada compañía es el 80% del presupuesto que se puede subvencionar. Eso sí, estas subvenciones no superarán en ningún caso los 150.000 euros por cada empresa de desarrollo que pueda beneficiarse de las subvenciones. El presupuesto mínimo del desarrollo de un videojuego para que pueda recibir la subvención es de 20.000 euros.

Con estas ayudas se busca financiar «proyectos consistentes en el desarrollo, comercialización e internacionalización de videojuegos«. En la convocatoria queda reflejado que las subvenciones se destinarán a videojuegos que se desarrollen para su explotación comercial en cualquiera de las plataformas existentes (PC, consolas, TV, smartphone, etc). También a los que se creen en el entorno de las industrias emergentes, como «serious games, gamificación enfocada a la empresa, cloud gaming, wearables, industria 4.0, etc«. En ningún caso podrán acceder a las subvenciones los videojuegos con contenido pornográfico, de apología de la violencia o que fomente el odio.

Además de estos requisitos, las empresas de desarrollo que presenten su candidatura para recibir estas ayudas tendrán que tener, como mucho, dos millones de euros de facturación, y un máximo de 10 empleados en plantilla (es decir, tener categoría de microempresa). De ellos, al menos uno debe haber colaborado en la creación de algún proyecto publicado con anterioridad. Y la empresa tiene que haberse creado al menos hace seis meses.

Todo sin olvidar que el videojuego cuyo desarrollo se apoyará con estas ayudas se tiene que sustentar «sobre propiedad intelectual del beneficiario, preexistente o generada a partir del videojuego subvencionado«. Y además, cuando se presente la solicitud de la subvención, el posible beneficiario de la misma no debe tener ningún acuerdo de cesión de los derechos de explicación del videojuego con terceros. En cualquier caso, las ayudas se ejecutarán, como máximo, 18 meses después de publicar la resolución de la concesión.

Tal como queda recogido en el BOE, el principal reto de estas subvenciones es contribuir a la consolidación de los estudios independientes, «conseguir hacerlos crecer y escalar internacionalmente, de forma que surjan empresas tractoras que refuercen el conjunto de la industria«. Así se pretende paliar uno de los principales problemas del sector en España: su excesiva atomización.