BT recortará 13.000 puestos de trabajo como parte de su reestructuración

BT se dispone a emprender un proceso de reestructuración que tendrá como una de sus consecuencias la pérdida de 13.000 de los 100.000 puestos de trabajo con los que cuenta en la actualidad. Los puestos a eliminar, según Reuters, serán todos de dirección y gestión, así como administrativos. Además, la compañía abandonará la sede que ocupa actualmente en Londres para trasladarse a unas oficinas más pequeñas de la ciudad. Con estas y otras medidas, el grupo espera poder dejar atrás las consecuencias del escándalo contable que ha sufrido en las últimas semanas, así como revertir su marcha en la bolsa.

El CEO de BT, Gavin Patterson, ha intentado también contentar a los accionistas manteniendo los dividendos de BT. También ha confirmado la puesta en marcha de un plan de financiación de pensiones, de 13 años de duración, con el que pretende acabar con su déficit, que a finales del mes de junio pasado superó los 12,5 millones de euros. Pero a pesar de estas medidas, según las previsiones, BT tardará tres años en volver a crecer, lo que ha hecho caer un 9% sus acciones.

Los operadores de bolsa achacan sus malos resultados a que las previsiones para este año del grupo han sido menores de lo esperado, así como a que sus ingresos del primer trimestre de 2018, que han caído un 3%, se quedaron por debajo de lo esperado. La consecuencia: el valor de los títulos ha caído un 22% en lo que va de 2018.

Pero los despidos en BT no implican que su plantilla se vaya a reducir tanto, ya que la compañía planea contratar unos 6.000 nuevos ingenieros y personal de atención al cliente de primer nivel. Estas medidas se han tomado como parte de un plan que pasa por reforzar sus áreas dedicadas al despliegue de la fibra, así como de la futura puesta en marcha de las redes 5G. Además de en estos campos, la reestructuración se centrará en los servicios básicos que necesitan tanto los consumidores como las empresas.

El CEO, que lleva en el cargo desde 2013, ha declarado que el grupo necesita cerciorarse de que son competitivos en el futuro, y de «asegurar que podemos proporcionar productos y servicios a nuestros clientes a un precio adecuado. Si comparamos cómo gestionamos el negocio con cómo lo hacen nuestros iguales, somos francamente demasiado complejos y pesados«.

El recorte de plantilla, el mayor que ha acometido BT desde 2008, ahorrará cerca de 1.700 millones de euros en costes a lo largo de los próximos tres años, según las estimaciones de la compañía. En total, la reestructuración tendrá un coste superior a los 1.100 millones de euros.