Tesla cumple sus objetivos, pero sus acciones bajan

Justo ayer pudimos confirmar que Tesla había conseguido cumplir dentro del plazo límite con sus objetivos de producción semanal del Model 3, un coche que es considerado como uno de los productos más importantes del catálogo de la empresa de Elon Musk por una razón muy sencilla: es su primer sedán de lujo económico, es decir el primer modelo que han diseñado pensando realmente «en las masas».

Como tal el Model 3 juega un papel clave en el camino de Tesla hacia la rentabilidad. Su acogida fue buena desde que se produjo su anuncio oficial, pero los problemas que ha tenido la compañía para cumplir con sus objetivos ha acabado jugando en su contra, ya que generó grandes inseguridades que no han podido disipar ni siquiera al confirmar que por fin han superado los 5.000 coches Model 3 producidos en una semana.

Tal y como estaba previsto al final los que han acabado juzgando el éxito o el fracaso de la compañía al cumplir su objetivo «por los pelos» han sido los inversores, y éstos no se han mostrado optimistas y han castigado a Tesla. La compañía vio como sus acciones experimentaban una caída del 4% el pasado lunes. El motivo es simple y nos lo da el analista de CFRA Efraim Levy, quien dijo que creen que el ritmo productivo que permitió alcanzar un total de 5.031 Model 3 en una semana no es sostenible, ni desde el punto de vista operativo ni desde el financiero.

¿Quiere decir esto que Tesla hizo un esfuerzo anormal de última hora para cumplir con los inversores y maquilar resultados? Pues sí, esa es básicamente la idea que ha transmitido Efraim Levy con su opinión, aunque este mismo analista ha confirmado que esperan que con el tiempo dicho ritmo acabe siendo no sólo sostenible sino superado.

Por su parte el CEO de Tesla, Elon Musk, ha dicho que espera que su compañía se ha convertido en un auténtico fabricante de coches, y que esperan poder elevar la producción hasta las 6.000 unidades semanales del Model 3 para finales del mes de agosto.