En las últimas semanas, los reveses para Huawei no han dejado de sucederse. A la detención de su CFO, a la espera en la actualidad en Canadá de que se resuelva su situación, se ha añadido la prohibición y veto de su equipamiento en diversas redes y países. Estados Unidos ya ha bloqueado el uso de equipo de la compañía y ZTE en las redes y sistemas del gobierno y baraja prohibir su presencia en redes estadounidenses.
Ahora está presionando a operadoras y países aliados para que dejen a Huawei fuera de sus futuras redes 5G. Y hasta ahora estas presiones no han tenido hasta ahora muy buenas consecuencias para la compañía china. Salvo en Francia, donde han decidido no prohibir sus equipos. Hasta ahora, cuando Reino Unido, tras sopesar la situación, ha decidido, según una información aparecida en el Financial Times de la que se ha hecho eco Reuters, no prohibir tampoco el uso de equipamiento de Huawei en las redes 5G del país.
Así, según el Centro nacional de ciberseguridad del Reino Unido, se pueden limitar y mitigar los riesgos que podría suponer el uso de equipos fabricados y comercializados por Huawei en las futuras redes 5G británicas, sin necesidad de tener que prohibirlos por completo.
Eso sí, también apuntan a que para limitar estos riesgos sería aconsejable utilizar varios proveedores de equipamiento. Y puede que sí queden restringidas algunas partes concretas de estas redes a la compañía, pero en ningún caso se prohibiría su compra y uso a las operadoras. BT sí ha decidido, por su parte, retirar el equipo 4G de Huawei de sus redes antes de 2021, y no los utilizará en el núcleo de sus redes 5G, según Cnet.
Las investigaciones realizadas por dicho centro todavía están en curso, por lo que resultará complicado que aparezcan en público estudios al respecto durante un cierto tiempo. Además, según la fuente que ha facilitado esta información, un portavoz del Departamento de Medios, Digital, Cultura y Deportes del gobierno británico, todavía no se ha alcanzado una conclusión definitiva sobre las medidas que se tomarán para mitigar los riesgos que plantea para ellos la incorporación de equipos de Huawei a dichas redes.
La decisión de no prohibir el uso de material de la compañía china en las redes 5G de Reino Unido podría suponer un serio revés para los planes de Estados Unidos. Los funcionarios del gobierno estadounidense llevan semanas manteniendo que Huawei podría utilizar su equipamiento para espiar para el gobierno chino, a pesar de que no hay pruebas de ello. Hasta ahora han tenido éxito con sus peticiones de bloqueo a la compañía en algunos países aliados, como ha sucedido en Australia, Japón y Nueva Zelanda.
Mientras, Canadá está barajando la posibilidad de prohibir que Huawei pueda suministrar equipo para redes 5G en el país. No obstante, ya hay una pequeña red 5G de Huawei desplegándose en una zona rural del país, y Telus, una de las principales operadoras del país, ha alertado de que si se prohibe el uso de material de la empresa china, en las redes 5G se retrasará y encarecerá su despliegue.
La República Checa ha emitido un aviso de seguridad sobre el peligro que al parecer supone el uso de infraestructura de la compañía en las redes de su país, por lo que Huawei ha amenazado con emprender acciones legales contra sus autoridades si no lo retiran.
Por otra parte, el gobierno de Alemania dijo el mes pasado que estaba valorando si prohibía o no el uso de equipo 5G de Huawei en el país por motivos de seguridad, aunque no han tomado una decisión, y han anunciado que lo consultarán detenidamente con las operadoras de telecomunicaciones.
Polonia decidió en enero prohibir que Huawei participase en el despliegue de redes 5G en el país, y varios días después la compañía se comprometió a trabajar con el gobierno polaco para establecer relaciones que llevasen a una mayor confianza. España, por el momento, no se ha pronunciado al respecto.