Empresas con historia: Huawei

De unos pocos años a esta parte, una empresa china de tecnología llamada Huawei no para de acaparar titulares. Muchos, sobre todo en los últimos meses, por culpa de la guerra comercial entre China y Estados Unidos. También por el veto que le ha puesto la Administración Trump a la compañía, aparte de presionar a todos sus aliados para que dejen de utilizar equipamiento de Huawei en sus redes 5G.

Pero esta compañía china lleva más tiempo haciendo ruido, y no precisamente por tener al gobierno estadounidense como enemigo declarado, sino por sus ventas de smartphones y por la relación calidad precio de su equipamiento para el desarrollo de redes. Sobre todo, para las 5G. Al escuchar hablar de ella, muchos pueden pensar que se trata de una compañía establecida hace varias décadas y con una larga historia a sus espaldas. Pero nada más lejos de la realidad, puesto que Huawei tiene poco más de 30 años.

En efecto, Huawei nació en 1987 en China, y su creación no puede entenderse sin las medidas de apertura que inició Deng Xiaoping allá por 1978. Entonces, China era un país bastante atrasado con respecto a otros en diversos aspectos. También en tecnología. Entonces, este mandatario chino dio los primeros pasos para abrir el mercado chino a la empresa privada. Su intención era dar incentivos a la inversión, pero también generar empleo. Como parte de estos planes se crearon las denominadas zonas económicas especiales. En estas áreas se podían abrir empresas privadas de diversos tipos. Además, se permitía la libre circulación de bienes y servicios.

Estas zonas eran en realidad ciudades enteras, y estaban situadas sobre todo en la costa oriental del país. A raíz de su nueva consideración, comenzaron a florecer en ella empresas de todo tipo, lo que llevó también a que creciesen en tamaño y número de habitantes. Una de estas zonas, la primera en crearse, fue Shenzen, que en 1978 era una localidad de 300.000 habitantes que vivía sobre todo de la pesca, y que desde entonces hasta ahora ha crecido de manera vertiginosa y es la sede de gran cantidad de multinacionales. Entre ellas muchas tecnológicas. Una de ellas es Huawei.

Allí fue donde Ren Zhengfei, un ingeniero y antiguo oficial del ejército chino, y que en 1987 tenía 44 años, creó Huawei con poco más de 3.000 dólares. Esta compañía tenía inicialmente 3 empleados, y se dedicaba a la tecnología en materia de telecomunicaciones, como en la actualidad. En concreto, a la distribución de productos importados de Central Privada Automática (PBX). Es decir, una central telefónica conectada a la red pública de telefonía. Con ella se podían gestionar las llamadas entrantes y salientes de manera independiente a otra central. Dos años después de su nacimiento, ya se dedica a fabricar y vender las suyas propias.

A pesar de su minúsculo tamaño, Huawei creció pronto en clientes y ventas, comercializando productos de telefonía en un país en el que hasta entonces no contaba con muchos hogares y empresas con línea telefónica. Sobre todo en las zonas rurales. Por lo tanto, fue muy bien acogida y pronto comenzó a crecer y a abrir un mercado que hasta entonces era prácticamente inexistente.

Su creador se implicó directamente en su crecimiento, puesto que era el encargado de convencer a los responsables de ayuntamientos y gobiernos provinciales de invertir en la necesidad de invertir en infraestructura de telecomunicaciones. Pasaron los años, y en 1993 lanza su propio switch digital telefónico. En 1994, Huawei ya vendía su propio equipo de terminales telefónicas. Fue su primer diseño de equipo de telecomunicaciones. De ahí, al salto al mercado de las ciudades más grandes de China.

Sin embargo, a pesar de su popularidad en China, fuera de sus fronteras era una completa desconocida. Ren Zhengfei estaba dispuesto a hacer que Huawei fuese conocida en todo el mundo. Por tanto, en 1996 comienza a dar sus primeros pasos fuera de China. Primero, cerca. Entonces se convierte en proveedor de la compañía Hutchison-Whampoa en Hong Kong. Pero su dirección comprende que necesita ayuda para adaptarse al mercado exterior, y en 1998 contrata a IBM para que le ayudase a transformar su estructura directiva y su línea y sistema de fabricación de productos para ello.

En 1999 comienza su andadura por el extranjero, y en 2001 acelera su expansión internacional. En 2003 finaliza su contrato con IBM, y comienza su fase de crecimiento vertiginoso, que no ha parado hasta la actualidad. En 2003 llegó a un acuerdo con 3Com para fabricar routers y conmutadores. Un año después, gracias a su acuerdo estratégico con Siemens, sus ventas fuera de China sobrepasan por primera vez a las que consigue en el seno del país.

En 2007 llega otro acuerdo, esta vez con Symantec. En virtud del mismo, ambas colaboran en el desarrollo de equipos de seguridad y almacenado de datos para operadores de telecomunicaciones. Y en 2008 trabaja con Optus en el desarrollo de un centro de innovación móvil en Australia, con el objetivo de acelerar la adopción de la banda ancha móvil de alta velocidad.

Poco a poco, Huawei se va abriendo un hueco en el mercado de las telecomunicaciones y apareciendo por las ferias del sector tecnológico más prestigiosas. En 2009, Huawei gana el Green Mobile Award en el GSMA Mobile Awards 2009, y su popularidad ya no tiene vuelta atrás.

También empiezan sus problemas, puesto que en 2012 comienzan los ataques contra ella, siempre por asuntos relacionados con un mismo tema: las acusaciones de que la compañía espía para el gobierno chino, algo que su dirección ha negado repetidas veces. Estos ataques arreciaron en 2018, y hasta ahora han hecho que sus smartphones desaparezcan prácticamente del mercado estadounidense y el mencionado veto, que por el momento está en suspenso hasta finales de verano. También se la ha vetado como contratista de varios gobiernos aliados de Estados Unidos, como Australia.

A pesar de todos los problemas, Huawei da hoy empleo a más de 100.000 personas solo en China, tanto de manera directa como indirecta. Asimismo, ha puesto en marcha varios centros de investigación repartidos por todo el mundo. En China los tiene en Shenzen, Shanghai, Pekín, Nanjing, Xi’an, Chengdu y Wuan. Además, también cuenta con centros de este tipo en países como Suecia, Ecuador, Irlanda, Colombia, México, India o Rusia.

Actualmente, Huawei es un auténtico emporio de las telecomunicaciones. Ocupa el segundo puesto en venta de smartphones a nivel mundial, es el proveedor de equipamiento de red de múltiples operadoras de telecomunicaciones en todo el mundo y es líder en patentes de tecnología relacionada con el 5G, entre otros temas. Sus soluciones se utilizan en más de 170 países, y cuenta con unos 180.000 empleados en todo el mundo.

Su dirección, que adoptó los métodos de gestión que aplican las empresas occidentales a la empresa, nunca han ocultado que su centro, tal como estableció su creador Ren Zhengfei, es el cliente, lo que él considera una de las principales claves de éxito de la compañía.