Huawei cree que el veto de Estados Unidos le hará perder 30.000 millones de dólares

Hace unos días tuvimos la oportunidad de repasar la historia de Huawei y nos dimos cuenta de que el gigante chino nació con una base muy humilde. Sus inicios no fueron fáciles, pero a lo largo de sus más de treinta años de historia ha sabido encadenar decisiones acertadas que le han permitido convertirse en el gigante que todos conocemos.

La posición que ocupa Huawei a día de hoy resulta incómoda para algunos. Estados Unidos es el mejor ejemplo, aunque como sabemos el ejecutivo de Trump ha encontrado en esto una oportunidad y no ha dudado en arremeter contra la compañía china para presionar al gobierno de Xi Jinping y utilizarla como moneda de cambio.

Su objetivo es claro y simple, han declarado a Huawei como amenaza para la seguridad nacional y la han vetado, pero Trump ha reconocido que estaría dispuesto a incluirla en un acuerdo comercial con China. Dicho de otra forma, si el gobierno de Xi Jinping hace concesiones en materia de aranceles Estados Unidos levantará el veto a Huawei.

La estrategia de Donald Trump no está siendo nada acertada. Por un lado el presidente de Estados Unidos está generando un profundo malestar en el sector tecnológico nacional (especialmente en la industria de los semiconductores), y por otro lado está animando a Huawei a acelerar su independencia de compañías como Google, que le suministran las licencias para utilizar Android y la tienda de aplicaciones Google Play Store.

Por último, aunque no por ello menos importante, está tensando la cuerda en sus relaciones comerciales con China, y está mostrando a los gigantes de dicho país que podrían ser los siguientes tras Huawei, lo que está creando un sentir nacionalista de apoyo mutuo entre empresas «rivales».

Habrá que ver cómo evoluciona todo esto, pero cabe la posibilidad de que Trump esté creando un monstruo del que al final no pueda escapar. Mientras tanto gigantes como Broadcom ya han empezado a alertar a los inversores de que el bloqueo a Huawei y a otras empresas chinas podría reducir sus ingresos de forma notable.

Huawei ha hecho lo propio y ha reconocido que el veto de Trump podría reducir sus ingresos en 30.000 millones de dólares. Hablamos de una previsión para el cierre de 2019 que, puesto en perspectiva, implica una reducción de sus pronósticos iniciales, que pasan de los 130.000 a los 100.000 millones de dólares. Siguen siendo números muy buenos, pero el gigante chino ha reconocido que no esperaban un ataque tan frontal tan duro por parte de Estados Unidos, así que tendrán que trabajar más duro de lo esperado para recuperarse.