Uber tiene más de 100 millones de usuarios, pero pierde dinero

Es un hecho, Uber no pasa por su mejor momento. Hace unos días os contamos que la compañía se estaba preparando para llevar a cabo un recorte de plantilla motivado por unos resultados mediocres, y tenemos los números que necesitamos para ilustrar esa realidad.

A simple vista podemos pensar que es «imposible» que a Uber le vayan mal las cosas, al fin y al cabo tiene una enorme presencia en todo el mundo y mantiene un alto grado de popularidad, pero tiene una explicación que vamos a entender perfectamente en las próximas líneas.

Echando un vistazo a los resultados vemos que durante el pasado mes de julio alrededor de 100 millones de usuarios recurrieron a los servicios de los conductores de la compañía, todo un logro que estuvo acompañado de otros números muy positivos, como el aumento del 35% que experimentaron los viajes frente al mismo periodo del año anterior (1.670 millones en total) y los 3.170 millones de dólares en ingresos.

Esos ingresos representan un aumento del 14% frente al mismo periodo del año anterior, pero al mismo tiempo supone una pequeña caída comparada con las previsiones de analistas e inversores, que apuntaron a los 3.360 millones de dólares.

UberEats tuvo un efecto positivo en los resultados de la compañía, y ayudó a atraer a nuevos clientes. El número de personas a las que Uber entregó alimentos durante el segundo trimestre de este año aumentó en un 140% frente al segundo trimestre de 2018, un dato muy positivo que confirma el peso que está adquiriendo este servicio para la compañía.

A pesar de todo Uber cerró el segundo trimestre del año con unas pérdidas de 5.240 millones de dólares, una cifra enorme que tiene, como dijimos, una explicación. Se estima que alrededor de 3.900 millones de dólares se deben al reparto de ganancias y premios pagados por acciones a sus empleados tras la salida a bolsa de la compañía el pasado mes de mayo, algo a lo que debemos sumar el premio de agradecimiento al conductor que entregaron en su momento, valorado en unos 298 millones de dólares.

Si descontamos todos esos «gastos» nos siguen quedando unos 1.000 millones de dólares en pérdidas, un resultado nada positivo que mantiene, además, la tendencia a los números rojos que abrió en el primer trimestre de 2019.

Dara Khosrowshahi, CEO de Uber, ha confirmado que la competencia en el sector ha sido enorme, pero que está empezando a racionalizarse, lo que sugiere que sus resultados podrían mejorar notablemente en el tercer trimestre de 2019.