El monedero móvil Apple Pay se está quedando con cada vez más pagos. En la actualidad ya acapara alrededor del 5% de las transacciones con tarjeta a nivel mundial, y según Quartz va camino de quedarse con la gestión del 10% de los pagos de ese tipo para 2025, según a un informe de tendencias elaborado por la consultora Bernstein. A medida que el servicio va creciendo se está convirtiendo en un rival a tener en cuenta para PayPal, pero también está comenzando a atraer la atención de las entidades reguladoras.
La división que incluye a Apple Pay, la de Servicios, ha generado a Apple 12.700 millones de dólares durante los últimos tres meses de 2019, un 17% más que durante el mismo periodo del año anterior, unos datos que refuerzan la apuesta de Apple por los servicios una vez que notón que las ventas de dispositivos comenzaba a bajar. Apple cuenta para dar impulso a su servicio de pago con una enorme reserva de dinero, años de experiencia en transacciones con tarjeta y una amplísima base de usuarios formada por cientos de millones de usuarios de iPhone.
La compañía no quiere dejar pasar la lucha por los pagos digitales, ya que se trata de una gran oportunidad que consigue alrededor de un billón de dólares en ingresos en todo el mundo. Visa y Mastercard procesan más de 14 billones en pagos cada año y siguen creciendo a medida que aumentan las transacciones online y el flujo a través de apps, mientras que los consumidores utilizan cada vez menos dinero en metálico.
Apple Pay consigue ingresos quedándose con una pequeña parte de cada transacción que se realiza a través del servicio. Los usuarios pueden almacenar sus tarjetas de débito y crédito en el monedero y utilizarlo para hacer pagos sin contacto, protegidos por seguridad biométrica, gracias a la tecnología NFC de su teléfono. Los pagos sin contacto crecen cada vez más, y según la consultora Juniper Research, se prevé que lleguen a 1,5 billones en 2024 solo en Estados Unidos. Es una notable subida desde este año, en el que se espera que generen 178.000 millones de dólares.
No hay precisamente escasez de apps de pagos, pero Apple Pay tiene varias ventajas con respecto a ellas. Para empezar, su app está preinstalada en los iPhones, y Apple tiene un fuerte control sobre la tecnología NFC que se usa para los pagos sin contacto. Por eso Apple Pay es el único monedero móvil para iPhone que puede hacer transacciones a través de NFC. Tanto Alipay como WeChat Pay, por ejemplo, usar códigos QR, que se leen a través de la cámara del teléfono, un sistema que Apple no controla.
Este es precisamente uno de los puntos que más preocupa a académicos, profesionales del derecho y directivos en lo que respecta a la competencia. Muchos mantienen que el chip NFC del iPhone es una forma de bloquear a la competencia y hacer que la compañía consiga que su app de monedero sea más popular. Los de Cupertino se defienden de estas acusaciones alegando que sus políticas son por seguridad contra los hackers, y también para hacer que la experiencia de usuario sea lo más agradable posible.
La compañía quiere dar todavía más peso y funciones a Apple Pay, relacionándolo con la tarjeta de crédito de la compañía, Apple Card. Mientras, Apple Pay sigue creciendo. Durante el último trimestre fiscal completo de la compañía, según el CEO de la compañía, Tim Cook, los ingresos y transacciones de Apple Pay subieron más del doble con respecto al anterior, y el monedero aumenta su disponibilidad cada vez más para los viajes en tren y autobús en todo el mundo. Se espera que esta posibilidad también llegue esta primavera a varias ciudades chinas, como Shenzhen y Guangzhou.
Eso sí, aunque Appe Pay avance, no es probable que llegue a desafiar a los gigantes de las tarjetas a corto o medio plazo. Mientras que en teoría, Apple podría crear su propia red independiente de los sistemas de tarjetas, desde Bernstein apuntan que los de Cupertino necesitan todavía las redes de tarjetas, que están por todas partes y generan confianza. Además, tanto Visa como Mastercard están habituados a tratar con partners del tipo de envergadura que incluso Apple Pay podría llegar a reunir.
Puede que esto no sea así con otros monederos, y según los analistas de Bernstein, «Apple Pay es sin duda una de las amenazas competitivas a largo plazo para PayPal«. Por ahora, PayPal es el líder en procesos de compra online, y también se beneficia de los efectos de haber estado desarrollándose desde principios de siglo. Pero Apple y PayPal podrían terminar compitiendo por el mismo territorio dentro de unos años.
Mientras tanto, los funcionarios europeos están vigilando más de cerca a Apple Pay. Los legisladores alemanes han aprobado hace poco una medida que habría obligatorio que las tecnológicas abriesen sus interfaces de pago, pero las entidades locales, como el Deutsche Bank, han decidido no sacar partido a la interfaz NFC de Apple.
Además, la Comisión Europea está investigando el control de Apple sonre la tecnología NFC del iPhone, en su segunda investigación del impacto del monedero móvil en el mercado. En la primera, la comisión dictaminó que había competencia suficiente, pero este veredicto podría cambiar a medida que aumente el uso de Apple Pay.
Foto: Mybloodtypeiscoffee