Los ingresos de Apple crecen y su dependencia del iPhone baja

Durante los últimos trimestres Apple ha puesto mucho empeño en reducir su gran dependencia de su producto estrella, el iPhone. Para conseguirlo la compañía de la manzana apostó por reforzar sus servicios y mejoró la inversión en wearables, lo que permitió la llegada de Apple TV+, Apple Arcade y Apple Music, entre otros, y la introducción de tecnologías avanzadas en el Apple Watch, entre las que destaca, sin duda, el electrocardiograma.

Algunos cuestionaron ese viraje hacia los servicios, pero lo cierto es que se trató de un movimiento totalmente natural y perfectamente razonable. Apple tiene un ecosistema envidiable gracias a la enorme popularidad de iOS, iPadOS, tvOS, watchOS y macOS, así que potenciar los servicios disponibles para ese conjunto de sistemas operativos le permitía ampliar la monetización de dicho ecosistema sin esfuerzo, y sin asumir grandes riesgos.

Tras ver los resultados que ha registrado Apple podemos ver que la estrategia de la compañía ha sido todo un éxito. Durante los seis  primeros meses de su año fiscal la compañía de la manzana ha registrado unos beneficios netos de 33.485 millones de dólares, una cifra que representa un crecimiento del 6,2% frente a los beneficios que obtuvo la compañía durante el mismo periodo del año pasado (31.526 millones de dólares).

Su facturación también creció un 3% en una perspectiva año sobre año, alcanzando un total de 124.069 millones de dólares, 4.069 millones de dólares más que en el mismo periodo del año anterior. Son resultados muy positivos que han permitido a los accionistas llevarse 7,63 dólares por acción, pero al mismo tiempo resultan muy curiosos, ya que confirman una reducción de la dependencia del iPhone.

Durante este periodo las ventas del iPhone, y también las de sus dispositivos Mac y iPads, experimentaron una bajada considerable. Las ventas del iPhone cayeron un 6,7% en los últimos tres meses; los Mac vendidos bajaron un 3% y los iPads cayeron un 10%. Con esos datos en mente puede parecer contradictorio hablar de unos resultados positivos y de un aumento de ingresos. No es un milagro, Apple se ha «salvado» gracias a su unidad de negocio de servicios y a los wearables.

Los ingresos obtenidos por la unidad de servicios de Apple experimentaron un crecimiento del 22,5%, mientras que las ventas de wearables crecieron un 16,6% (interanualmente). Esto fue suficiente para amortiguar la caída de las ventas de hardware que hemos indicado anteriormente, y confirma que la compañía que dirige Tim Cook ha tomado decisiones muy acertadas.

A pesar de que los resultados han sido positivos, y de que confirman como dijimos que Apple está logrando superar poco a poco su dependencia del iPhone, las acciones de la compañía bajaron un 1,74% en el momento en el que se hicieron públicos.