Sin acuerdo aún para la tasa digital a nivel de OCDE: se espera alcanzarlo a mediados de 2021

La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) todavía no ha conseguido llegar a un acuerdo sobre el marco internacional que alumbrará una tasa digital que grave las actividades en los distintos países de las plataformas digitales multinacionales. Pero esto no quiere decir que no se vaya a conseguir, puesto que los miembros de la organización están comprometidos a alcanzarlo y se han emplazado, según un comunicado, a finalizar las negociaciones para aprobar una tasa digital global a mediados del próximo año 2021. Mientas, España ya ha aprobado su tasa Google, a la espera de lo que suceda con esta tasa, que de aprobarse sustituiría a la propia.

La OCDE es el organismo que se encarga de la coordinación de las negociaciones entre los 137 países y jurisdicciones que componen la organización, y a pesar de no haber conseguido un acuerdo sobre la tasa digital sí que tiene ya listas las dos propuestas que espera que sirvan de base para llegar a él, que acaba de hacer públicas.

Los miembros de la OCDE son conscientes de que la ausencia de una solución tomada por consenso podía desembocar en la proliferación de tasas digitales unilaterales en muchos países, y como consecuencia a un aumento de las dispuestas en comercio y sobre impuestos. Esto minaría tanto distintas inversiones como la certidumbre que hay sobre tasas en muchas regiones. Incluso podría derivar, en el peor de los casos, en una guerra global comercial por las tasas unilaterales aprobadas en el mundo. Se calcula que si no se llega a un acuerdo para la puesta en marcha de una tasa digital global, el producto interior bruto a nivel mundial se reduciría en un 1%.

El impacto económico que tendría la aprobación de una de las dos soluciones propuestas por la OCDE como documentos de trabajo para la negociación del acuerdo es notable. Así, de aprobarse la segunda propuesta, podrían conseguirse unos 100.000 millones de dólares de ingresos anuales globales, y recaudar hasta el 4% de lo conseguido por tasas de ingresos corporativos. En caso de que se apruebe la primera, se podrían redistribuir unos 100.000 millones de dólares adicionales a las distintas jurisdicciones y mercados para asegurar un marco de tasas internacional más justo.

El Secretario general de la OCDE, Angel Gurría, ha señalado que «está claro que las nuevas normas se necesitan con urgencia para asegurar la justicia y la equidad en nuestros sistemas de impuestos, así como para adaptar la arquitectura internacional de tasas a nuevos y cambiantes modelos de negocio. Sin una solución global y consensuada, el riesgo de que haya medidas unilaterales y no coordinadas crece día a día. Es imperativo que llevemos este trabajo hasta el final, porque si no se consigue hay riesgo de que las guerras sobre impuestos se transformen en guerras comerciales en una etapa en la que la economía global está sufriendo enormemente«.

Foto: OCDE/Andrew Wheeler