Las memorias DDR5 serán una de las grandes novedades en 2021

DDR5 es el último estándar aprobado para mejorar uno de los componentes principales de la arquitectura de las computadoras. La memoria de acceso aleatorio (conocida como RAM) tiene la misión principal de cargar instrucciones de la CPU, además de manejar datos del sistema y aplicaciones mientras se ejecutan en la computadora como almacenamiento temporal de instrucciones y datos frente a la persistente de otros componentes como discos duros o unidades de estado sólido.

JEDEC, la organización responsable de este estándar publicó el pasado julio las especificaciones finales para las memorias DRAM DDR5, completando las relativas a la versión para dispositivos portátiles/móviles, LPDDR5 (Low Power Double Data Rate 5). Las principales compañías del sector como Micron, ya habían anunciado distintos desarrollos para su adopción, programas de habilitación tecnológica para fabricantes y módulos de prueba y calificación.

Otra de las firmas de semiconductores punteras, SK Hynix, anuncia el lanzamiento de lo que publicitó como la «primera DDR5 del mundo». Como suele suceder en el lanzamiento de nuevas normas tecnológicas globales está destinada a aplicaciones profesionales, como producto de alta velocidad y densidad optimizado para Big Data, Inteligencia Artificial y aprendizaje automático.

Hace pocas semanas Asgard, un fabricante chino relativamente desconocido, anunció su primer kit. Son dos módulos con clasificación DDR5-4800 y capacidad de total de 64 Gbytes, aunque el proveedor indica que también estarán disponibles en capacidades de 32 y 128 Gbytes. El kit tiene un voltaje nominal de 1,1 voltios y una latencia de 40-40-40, y está destinado al mercado de consumo. Esta misma semana un fabricante chino de memorias ha publicado las primeras pruebas bajo la plataforma Intel Alder Lake-S para sobremesas con muy buenos resultados.

Memorias DDR5, ¿Qué aportan?

La nueva norma contempla importantes avances en rendimiento, consumo energético, operaciones o capacidad frente a DDR4, además de otras propias de la fabricación, mejora del controlador de datos, del circuito integrado de administración de energía o del código de corrección de errores (ECC) que incluyen estos desarrollos para servidores. A nivel general, podemos esperar lo siguiente:

• Aumento de rendimiento. DDR5 doblará la frecuencia de trabajo base de DDR4 situada en 2.133 MHz, a 4.266 MHz en DDR5 con un máximo de 6.400 MHz. Todos ellos son valores normalizados, porque en la práctica serán superiores como hemos visto en DDR4, donde los fabricantes practican técnicas de overclocking para aumentar la frecuencia base a niveles superiores.
• Mayor capacidad. La mejora de la densidad bajo las últimas técnicas de creación de chips que no existían en el lanzamiento de DDR4, posibilitará un aumento de capacidad de los módulos. Se esperan desarrollos únicos con 256 GB en doble canal y en máquinas empresariales con matrices de ocho canales, la memoria instalada podrá alcanzar la friolera de 4 Tbytes en una sola placa.
• Menor consumo. DDR5 ajustará el consumo base a 1,1 voltios, casi un 20% frente al base de DDR4. Un nuevo modo de suspensión profunda reducirá el consumo a la mitad en LPDDR5.
• Mejora en las operaciones. DDR5 usará operaciones independientes de activación, escritura, lectura o refresco de la información. Todas ellas serán autónomas según los grupos con bancos de memoria, algo que hará que mejore la eficiencia y el rendimiento general.
• Fabricación. Procesos tecnológicos avanzados de 10 nanómetros e inferiores.
• Precio. Los módulos equivalentes no serán más baratos que DDR4, pero la mejora de costes por los procesos de fabricación avanzado y el aumento de densidad, debería permitir equipar sistemas con mayor capacidad a un precio inferior.

Comercialización de DDR5

Como ocurriera con normas anteriores del estándar, los primeros módulos DDR5 deberían estrenarse en servidores y centros de datos antes de pasar al mercado de consumo. No es un componente que se suela renovar con frecuencia y el cambio se suele producir cada 7 u 8 años.  Teniendo en cuenta la enorme cantidad de computadoras y dispositivos que utilizan las memorias RAM, su despliegue será gradual y convivirán varias generaciones.

Comentar que DDR5 no será compatible con normas anteriores y los usuarios necesitarán nuevas placas base y chipsets que la soporten. Intel ya ha anunciado su soporte en la nueva plataforma de procesamiento Alder Lake y se espera que AMD haga los propio con las nuevas unidades de procesamiento APUs serie «Van Gogh».

Se espera un lanzamiento efectivo a finales de 2021. Los analistas creen que el grado de adopción en 2021 será del 10% entre el total de las memorias DRAM instaladas. Los analistas esperan que en 2024 las memorias DDR5 supongan el 43% del total.