NVIDIA RTX A2000, una tarjeta gráfica de perfil bajo para estaciones de trabajo

La NVIDIA RTX A2000 es una tarjeta gráfica basada en la arquitectura Ampere que se dirige al sector profesional. En términos de diseño, todo parece indicar que utilizará un formato de perfil bajo, aunque ocupará dos ranuras de expansión, como se puede ver en la imagen de portada, algo a tener muy en cuenta si pensamos utilizarla en equipos muy pequeños, donde el espacio interno sea un recurso limitado.

A pesar del cambio de formato, el diseño de referencia no cambiará. La NVIDIA RTX A2000 mantendrá el acabado en color negro con matices en color dorado, y tendrá el clásico ventilador de turbina que se ocupa de sacar el calor al exterior. Sus especificaciones no han trascendido, pero posicionará por debajo de la RTX A4000, que está basada en el núcleo gráfico GA104, así que podemos intuir algunas cosas interesantes.

La primera es que la NVIDIA RTX A2000 será una tarjeta gráfica profesional de gama media «económica», y la segunda es que utilizará, casi con total seguridad, el núcleo gráfico GA106 de NVIDIA, el mismo chip que ya hemos visto en las GeForce RTX 3060. ¿Significa esto que tendrá las mismas especificaciones que dicha tarjeta gráfica? No necesariamente, de hecho ya hemos visto que la serie RTX A de NVIDIA tiene unas especificaciones distintas a sus «parientes más cercanos» dentro de la serie RTX 30.

Con todo lo anterior en mente, creo que lo más probable es que la NVIDIA RTX A2000 tenga una configuración ligeramente inferior a la RTX 3060. Dado que esta viene con 3.584 shaders, es lógico pensar que aquella podría contar con una configuración de 3.072 shaders, un bus de 192 bits con 12 GB de memoria GDDR6, 96 unidades de texturizado, 96 núcleos tensor para inteligencia artificial, 48 unidades de rasterizado y 24 núcleos RT para trazado de rayos.

Por lo demás, la NVIDIA RTX A2000 contará con todas las tecnologías exclusivas de Ampere, incluyendo el DLSS de segunda generación, el trazado de rayos con aceleración completa, y asíncrona, a través de hardware y el trabajo concurrente con operaciones FP32 e INT32. No tenemos detalles sobre su posible fecha de lanzamiento, y tampoco conocemos el precio, pero está claro que será inferior a los 1.000 euros.