Los precios de las unidades SSD podrían subir más de un 15%

Los precios de las unidades SSD podrían volver a dispararse hasta en un 15% a lo largo de los próximos meses. Y esta vez, tal y como explican desde la consultora TrendForce, la escalada no estaría causada por el minado de la criptomoneda Chia, sino por la gran demanda de componentes con la que las principales marcas van a tensionar el mercado a partir del mes de septiembre.

¿A qué se debe entonces? Como indican desde TrendForce, está previsto que en las próximas semanas tanto Intel como AMD comiencen a entregar su nueva generación de procesadores: Intel con su nueva línea Ice Lake de procesadores Xeon y AMD en su plataforma Milan Epyc.

Como consecuencia de esta coincidencia no intencionada, se producirá un efecto dominó por el que los principales fabricantes (HPE, Dell Technologies, Lenovo, Super Micro, etc.) liberen su nueva generación de servidores en el mismo trimestre.

Esto por supuesto, impulsará el crecimiento del mercado de servidores, pero también incrementará la necesidad de adquirir unidades SSD tanto por parte de las empresas como sobre todo, por parte de los principales proveedores hiperescalares de nube pública, tanto en Estados Unidos como en China.

Según la consultora, es de esperar que la producción de las unidades SSD crezca un 7% en el próximo trimestre, pero a la vez, que este incremento no sea suficiente como para poder responder a la fuerte demanda que se espera en este mismo periodo de tiempo. Es así que si esto se confirma, podríamos ver cómo el incremento de precios afecta tanto a las empresas,  como a los consumidores domésticos.

Trendforce afirma sin embargo que los precios podrían volver a bajar en el último trimestre del año, coincidiencio con una supuesta ralentización en la demanda de nuevos servidores, una vez se haya entregado el grueso de pedidos del trimestre anterior.

Ya de cara al año que viene, la compañía predice que tanto Intel como Amd, lanzarán nuevos procesadores compatibles con PCI Express Gen5 y la interfaz CXL (Computer Express Link). Ambas opciones de conectividad, permites conexiones de alta velocidad que suponen un movimiento de datos mucho más rápido.

Esto es especialmente interesante en un momento en el que los cuellos de botella en el CPD se están produciendo no tanto en el área de procesamiento (en el que la potencia crece a medida que lo hace el volumen de datos), sino precisamente, en el área del almacenamiento.