La mega fábrica de Intel costará hasta 120.000 millones de dólares

La nueva fábrica de Intel con la que el gigante del chip quiere superar todos sus problemas en semiconductores y abrir nuevas vías de negocio, será colosal. Una ‘pequeña ciudad’ en la que se invertirá una cifra mareante: hasta 120.000 millones de dólares.

Intel ha tomado el ‘todo por los cuernos’ desde que el nuevo CEO y ex de VMware, Pat Gelsinger, tomará posesión. No por nada su primer anuncio, IDM 2.0, supondrá uno de los mayores cambios de estrategia empresarial de su historia con el objetivo de superar los problemas actuales de producción interna de semiconductores y también convertirse en una foundrie para fabricación de terceros.

El programa es muy ambicioso y contempla tres partes diferenciadas para mantener a Intel al frente del negocio de semiconductores.

• Fabricación interna. Clave para el suministro de sus propios procesadores y reducir los problemas actuales que le han llevado (por primera vez) a subcontratar la fabricación a proveedores externos.
• Fábricas externas. Uso de foundries como TSMC, Samsung y GlobalFoundries para determinados productos que Intel denomina «núcleo de ofertas informáticas» para consumidores y empresas.
• Intel Foundry Services. La más novedosa e interesante por la que Intel se convertirá en una foundry para abrirse a producir chips para terceros fabricantes. IFS funcionará como una unidad de negocio independiente y fabricará chips por encargo de terceros bajo las dos arquitecturas dominantes, x86 y ARM, y también para la tercera y prometedora RISC-V.

Mega fábrica de Intel

Todo ello necesita tecnologías avanzadas y plantas de producción adecuadas. O comprar alguien establecido como GlobalFoundries. La fabricación para terceros se producirá en plantas situadas en Estados Unidos y Europa e Intel espera atraer a grandes tecnológicas como Qualcomm, Amazon, Microsoft, IBM y Google. También a Apple. Seguramente la que ha terminado provocando este cambio de rumbo total ante el cambio de arquitectura hacia ARM que ha supuesto su proyecto silicon para Mac.

En una entrevista con el Washington Post, Gelsinger reveló algunos detalles del proyecto y de la mayor de las nuevas fábricas que se construirá en Estados Unidos. Será un sitio enorme que constará de seis a ocho módulos, cada uno de ellos con un coste de entre 10/15.000 millones, lo que significa que el coste final de la construcción puede alcanzar los 120.000 millones de dólares.

«Es un proyecto para la próxima década del orden de los 100.000 millones de capital y 10.000 empleos directos. Según nuestra experiencia, se crearán 100,000 empleos totales. Esencialmente, queremos construir una pequeña ciudad», dice Gelsinger.

Intel estudia varios estados como posibles ubicaciones. No solo debe considerar factores energéticos, hídricos y ambientales, sino que también quiere que el proyecto esté cerca de una universidad para atraer personal cualificado.

En cuanto a los procesos tecnológicos de producción, gran caballo de batalla y causante de sus problemas actuales, dado que se espera que las operaciones comiencen en 2024, podemos esperar que la planta comience con procesos de 7 nanómetros antes de pasar a los más avanzados con la tecnología «RibbonFET».

Gelsinger también mencionó la ley CHIPS, que proporcionaría incentivos fiscales y financiaría la I + D para apoyar la fabricación de semiconductores en Estados Unidos. «¡Ve rapido!» instó a los legisladores. «Consigamos que esto se convierta en ley porque quiero construir fábricas mucho más rápido de lo que podemos hoy», aseguró el CEO de Intel.