AMD prepara gráficas RDNA 2 para minar criptodivisas

Una filtración nos ha dejado ver que AMD está preparando un conjunto de soluciones gráficas que, en teoría, estarían especializadas en el minado de criptodivisas, y basadas en la arquitectura RDNA 2. Dicha arquitectura tiene una particularidad muy importante, y es que utiliza caché infinita para mejorar el ancho de banda a través de picos concretos que, en resumen, mejoran el rendimiento siempre que se cumplan unas circunstancias concretas.

Sin embargo, cuando se utilizan para minar criptodivisas, su rendimiento es inferior al que consiguen las soluciones equivalentes de NVIDIA, equipadas con una configuración de memoria más rápida y con un bus mayor, lo que se traduce en un ancho de banda mucho más alto que, además, se mantiene de forma sostenida y sin condiciones, cosa que no ocurre con la caché infinita.

Con el auge del minado de criptodivisas, NVIDIA decidió lanzar su propia línea de productos especializados en dicha tarea, y los agrupó alrededor del nombre CMP. Fue un movimiento acertado que, al final, le ha salido muy rentable, así que no es extraño pensar que AMD pueda lanzarse también a ese nicho del mercado gráfico con una nueva línea de soluciones especializadas.

La filtración nos ha dejado ver todas las claves de diseño que tendría el tope de gama de AMD dentro de esa nueva generación de soluciones especializadas en minado, y gracias a esto hemos podido confirmar cosas interesantes.

El modelo que se ha filtrado carece de conectores de imagen, lo que significa que estamos claramente ante una solución especializada en minado de criptodivisas. También prescinde de cualquier estridencia estética, viene con un sistema de refrigeración pasiva y utiliza dos conectores de alimentación de 8 pines, lo que parece indicar que estaría basada en la GPU Navi 21, que utiliza la arquitectura RDNA 2.

No tenemos detalles sobre la variante concreta, así que podríamos estar ante una adaptación de la Radeon RX 6800, de la Radeon RX 6800 XT o de la Radeon RX 6900 XT. El precio de venta tampoco ha trascendido, pero este tipo de soluciones gráficas han demostrado que no son precisamente baratas, a pesar de que cubren un nicho concreto del mercado, y que a diferencia de las tarjetas gráficas tradicionales, son totalmente inútiles cuando no se utilizan para minar.