Google compra un edificio de oficinas para su sede en Nueva York por 2.100 millones

La vuelta a las oficinas, al menos en modelo híbrido, avanza lenta pero inexorable entre las principales multinacionales, que no se detienen ante las protestas de sus empleados y siguen adelante con sus planes. Incluso comprando edificios para abrir nuevas sedes, como ha hecho Google en Nueva York. Allí, la compañía ha comprado un edificio en Hudson Square, por el que ha pagado 2.100 millones de dólares, y que será su sede en la ciudad.

No es el primer edificio de oficinas que compra Google en Nueva York, ya que en 2010 compró el edificio de la Autoridad portuaria de la ciudad en el cruce entre las calles 15 y novena, por 1.900 millones, y en 2018 compró el edificio Chelsea Market por 2.400 millones de dólares. A pesar de permitir que una parte de sus trabajadores van a poder teletrabajar, y que muchos van a contar con un modelo híbrido entre presencial y remoto, en Google creen que las reuniones en persona para colaborar seguirán siendo una parte integral de la empresa en el futuro.

A partir de ahora, el edificio recién comprado entrará en una fase de remodelación, y se espera que abra hacia mediados de 2023 para convertirse en la oficina de Google más grande fuera de California. En la actualidad, el edificio, conocido como la Terminal de St John’s, que hasta ahora era una instalación dedicada a flotas de carga, está en pleno rediseño para transformarlo en un edificio sostenible y conectado, con un diseño biofílico. Contará con varios espacios exteriores y reconectará el barrio de Hudson Square con la zona costera de la ciudad.

Google espera que, cuando esté listo, el edificio tenga cabida para más de 14.000 empleados. Actualmente cuenta con 12.000 en Nueva York, que trabajan desperdigados por distintos edificios de Manhattan. Se desconoce por ahora si la compañía tiene intención de seguir contratando personal en la ciudad y la zona. Por ahora, lo que sí ha hecho cambiar sus planes de reapertura y aplazar la vuelta de su plantilla a todas sus oficinas en Estados Unidos hasta el próximo 10 de enero de 2022 a la vista de la marcha de la pandemia. Hasta entonces, los que lo deseen puede no obstante acudir a la oficina de manera voluntaria.