Biden endurece las restricciones a Huawei y ZTE

No es un secreto, Huawei y ZTE son dos de los gigantes chinos dentro del sector tecnológico que más han sufrido por las restricciones que le ha impuesto Estados Unidos. La historia es bastante larga, pero hace cosa de un año vimos que ZTE no había salido de la lista negra, y que con la llegada de Biden la situación de Huawei tampoco iba a mejorar.

En su momento sonaron voces positivas que decían que, al final, cabía la posibilidad de que la cosa mejorase gracias al carácter más moderado de Biden, en comparación con Trump, pero al final hemos podido confirmar que no solo no ha sido así, sino que además al presidente de Estados Unidos no le ha temblado la mano al firmar la Ley de Equipamiento Seguro, una nueva normativa con la que el país pretende tomar medidas contra las compañías chinas dedicadas al sector de las telecomunicaciones, y que se fundamenta, como de costumbre, en el argumento de la seguridad nacional.

Esta ley implica que la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos ya no puede revisar, ni aprobar, ninguna solicitud de autorización emitida por empresas que representen un riesgo inaceptable para la seguridad nacional. ¿Qué quiere decir esto? Pues que Huawei y ZTE se han quedado sin esa opción para intentar conseguir la aprobación del uso de su equipamiento de telecomunicaciones en Estados Unidos.

Resulta curioso ver que la firma de esta ley se ha producido poco antes del encuentro que tendrá lugar entre Joe Biden y Xi Jinpin, un evento en el que ambos líderes tendrán la posibilidad de acercar posturas para intentar «suavizar» una guerra comercial que lleva ya demasiado tiempo inmersa en un marcado tira y afloja por parte de ambos países.

Veremos en qué queda todo esto, pero los planes de Estados Unidos para dejar totalmente fuera a Huawei y ZTE van muy en serio, no en vano la FCC lanzó a principios de este año un programa valorado en 1.900 millones de dólares para ayudar a las teleoperadoras estadounidenses a sustituir, de forma directa, el equipamiento de Huawei y ZTE que estén utilizando. Esto apunta a otro objetivo claro, limpiar a las teleoperadoras del equipamiento de ambas compañías.

En todos los entes y organizaciones públicas clave de Estados Unidos se mantiene ese sentir en general, y de forma mayoritaria, es decir, se considera que el riesgo que representan estas empresas para la seguridad nacional del país es inaceptable, y por ello creen que se debe cerrar cualquier agujero que pueda permitir su entrada.