Intel anuncia una inversión de 33.000 millones de euros en Europa

El gigante del chip ha confirmado la primera fase de su plan de inversión en Europa, y lo ha hecho explicando a dónde irán a parar los primeros 33.000 millones de euros del total de 80.000 millones que Intel tiene pensado invertir en el viejo continente: Alemania, Francia e Irlanda, aunque con metas distintas en cada caso.

Pat Gelsinger, CEO de Intel, ha explicado que los 17.000 millones de euros que invertirán en Alemania se utilizarán para montar una fábrica de semiconductores, y que esta será capaz de trabajar con nodos de punteros (de última generación). Irlanda se llevará una inversión de 12.000 millones de euros que tendrá como objetivo ampliar la fabricación de semiconductores, y también se destinará una parte de los 33.000 millones de euros a montar un centro de diseño e I+D en Francia.

Otros países como Italia, Polonia y España también recibirán inversiones cuyas cantidades no han sido concretadas, y que tendrán como objetivo principal impulsar el I+D, así como la fabricación y otros servicios necesarios para la producción de semiconductores. Con este movimiento, Intel ha dado un importante paso adelante en su estrategia de ampliar su capacidad de fabricación de semiconductores, y ha cumplido con su promesa de hacerlo en suelo europeo.

El CEO de Intel comentó que:

«Las inversiones que tenemos previstas son un paso importante tanto para Intel como para Europa. La Ley de chips de la UE permitirá a las empresas privadas y a los gobiernos trabajar juntos para hacer avanzar drásticamente la posición de Europa en el sector de los semiconductores. Esta amplia iniciativa impulsará la innovación en I+D de Europa y traerá la fabricación de vanguardia a la región, lo que beneficia a nuestros clientes y socios de todo el mundo. Nos comprometemos a desempeñar un papel fundamental en la configuración del futuro digital de Europa durante las próximas décadas».

Se espera que la construcción de la nueva planta de fabricación de semiconductores de Intel, que como dijimos estará asentada en Alemania, comience en 2023. Si todo va según lo previsto y no se produce ningún tipo de retraso, dicha planta debería estar preparada para empezar a fabricar obleas de semiconductores en algún momento de 2027. Dicha fábrica dará trabajo a unos 7.000 obreros en su etapa de construcción, y posteriormente a 3.000 personas altamente cualificadas (producción de chips).

En España, se reforzará la colaboración con el Supercomputing Center de Barcelona, y el objetivo principal será avanzar en el desarrollo de la arquitectura a «zettaescala» durante un periodo de diez años. La imagen que encontraréis al final de este artículo, y que podéis ampliar haciendo clic en ella, contiene un resumen de los planes de Intel repartidos por países.