La Unión Europea prevé un ahorro millonario gracias a la Ley de Resiliencia Cibernética

La seguridad de los dispositivos conectados a Internet es ahora más importante que nunca. Por eso, la Unión Europea ha lanzado una propuesta de Ley de Resiliencia Cibernética sobre las medidas que se podrían adoptar y que ahorrarían millones de euros. El objetivo no es solo proteger al consumidor, sino exigir que los fabricantes hagan las revisiones necesarias para que sus dispositivos no sean víctimas de ataques.

Garantizar la seguridad al 100 % de un móvil, ordenador, consola o televisor no es nada sencillo. Siempre va a existir algún tipo de debilidad que los ciberdelincuentes aprovecharán para llevar a cabo sus malas acciones. Pero, que esto sea una realidad no significa que no se deba ser más exigente con relación a la ciberseguridad. La Ley de Resiliencia Cibernética pretende cambiar el curso de las cosas.

La ciberdelincuencia a Europa le cuesta millones de euros y dada la situación actual conviene tomar medidas para proteger a los consumidores y evitar perder dinero resolviendo problemas de ciberseguridad. Aunque no lo parezca, el gasto que se realiza en solventar los ataques malintencionados es elevado y la prevención es la forma en la que se puede reducir este gasto. En esto quiere centrarse la nueva ley.

Las previsiones que ha hecho la Unión Europea es que esta Ley de Resiliencia Cibernética puede permitir un ahorro de cerca de 300 000 millones de euros. Una cifra elevada que se logrará mejorando la supervisión de los fabricantes de aquellos dispositivos que usan Internet para que el riesgo para los usuarios sea el menor posible. Para eso, se insistirá en las revisiones y en las sanciones.

¿Puede la Ley de Resiliencia Cibernética perjudicar a los fabricantes?

La Unión Europea no considera que la propuesta de Ley de Resiliencia Cibernética pueda perjudicar a los fabricantes. Sí es verdad que estarán expuestos a las sanciones si la incumplen y si no llevan a cabo las verificaciones o correcciones pertinentes en temas de vulnerabilidad. Sin embargo, considera que esto puede mejorar notablemente su imagen de marca favoreciendo la relación con sus consumidores.

Cuando un posible cliente sabe que ese teléfono móvil que va a adquirir va a ser mucho más seguro porque hay una ley detrás que le ampara, la confianza en los fabricantes que trabajen con este tipo de dispositivos aumentará. Pues, en un mundo tan digitalizado como en el que nos encontramos hoy en día, reducir la sensación de vulnerabilidad ante un ataque malintencionado es positivo.

Además, aquellos productos que, tras las revisiones, continúen sin adaptarse a la Ley de Resiliencia Cibernética podrán ser retirados del mercado. Por tanto, los consumidores se sentirán mucho más seguros al adquirir cualquier tipo de dispositivo con acceso a Internet y esto repercutirá positivamente en las ventas y en el propio ahorro que la Unión Europea prevé hacer gracias a esta propuesta de ley.

¿Cuándo se sabrá algo sobre la Ley de Resiliencia Cibernética?

Aún es muy reciente la propuesta que se ha hecho sobre esta ley, por lo que habrá que esperar para conocer los requisitos y estándares que los fabricantes deberán tener en cuenta en el momento de fabricar sus productos. Tras haberla anunciado el 13 de septiembre, conviene analizar con más detenimiento su viabilidad.

Su aprobación puede generar cambios muy importantes y un ahorro económico considerable. Los problemas con los ataques cibernéticos no han dejado de crecer en los últimos años, sobre todo, tras la aparición de ransomware, un programa malicioso que ha amenazado a España y otros países de la Unión Europea. La Ley de Resiliencia Cibernética puede ser una manera de ponerle freno.