Micron construirá la fabrica de chips más grande de Estados Unidos

Micron Technology ha anunciado que va a invertir 20.000 millones de dólares en la construcción de la que ha calificado como la mayor fábrica de semiconductores de Estados Unidos hasta la fecha. Además, ha señalado que esos 20.000 millones pueden ser solo el principio de la inversión, puesto que es posible que a lo largo de los próximos 20 años gaste hasta 100.000 millones de dólares en ampliarla.

La fábrica estará en el estado de Nueva York, en el Condado de Onondaga, y tendrá un tamaño equivalente más o menos al de 40 campos de fútbol americano. Se espera que con ella se creen hasta 50.000 puestos de trabajo en la zona, entre los que habrá 9.000 puestos de Micron, con salario elevado. La planta también servirá para aumentar de manera notable el suministro local de chips.

El anuncio sigue al realizado el pasado mes de septiembre, cuando la compañía anunció que invertiría unos 15.000 millones de dólares hasta el final de esta década en una fábrica de memoria avanzada en Boise (Idaho, Estados Unidos), después de confirmar semanas antes que invertiría 40.000 millones de dólares hasta 2030 en la construcción de plantas de última tecnología para la fabricación de memoria en EEUU.

En un comunicado, el Presidente y CEO de Micron, Sanjay Mehrotra, ha dado las gracias al Presidente Joe Biden y a los miembros del Congreso de Estados Unidos por aprobar el pasado mes de agosto la ley CHIPS y Ciencia, que destina 50.000 millones de dólares al apoyo a empresas que quieran construir instalaciones para la fabricación de chips en suelo estadounidense. Con ella, el gobierno de EEUU quiere revitalizar la fabricación doméstica de semiconductores, que en los últimos años ha bajado por la competencia de los países del este asiático.

De la cantidad prevista por la ley para el desarrollo de plantas de fabricación de chips, Micron se llevará 5.500 millones de incentivo del estado de Nueva York, que irá recibiendo a lo largo de la vida del proyecto de construcción. También recibirá subvenciones federales anticipadas, y créditos sobre impuestos, según recoge también la ley CHIPS y Ciencia. Estas ventajas están destinadas a facilitar tanto al contratación de personal como la inversión de capital.

Aún así, Micron, como el resto de tecnológicas, se va a tener que enfrentar con una barrera importante: la falta de talento adecuado. Gupta reconoce que encontrar trabajadores cualificados va a ser complicado, aunque hay diversos programas universitarios, y en community colleges, que cuentan con el patrocinio de fabricantes de chips con el fin de formar trabajadores cualificados. Tanto Micron como el Estado de nueva York han asegurado que invertirán 500 millones de dólares en el desarrollo comunitario y de plantilla, con énfasis en poblaciones desfavorecidas, mientras se construye la fábrica.

Aun así, los fabricantes deben competir en salarios con los hiperescalares y los fabricantes de software que pueden pagar más, aunque Gupta espera que las subvenciones del gobierno puedan ayudar en este aspecto. «Las fábricas entrarán en funcionamiento entre 2024 y 2030 y la mayoría cuentan con un nivel de automatización elevado. En un principio se necesitan trabajadores de la construcción, pero los requisitos de plantilla y de operaciones no son demasiado elevados«.

La compañía ha elegido el estado de Nueva York con base en sus instituciones educativas superiores, el acceso a talento que no cuenta con una representación elevada en puestos técnicos y por un número significativo de población militar, que está en línea con el compromiso de Micron de contratar veteranos. Además, la zona tiene diversas fuentes de agua, y fuentes de energía limpia y fiable suficientes para un proyecto de la envergadura de este.

La preparación del lugar donde se construirá la planta empezará en 2023, y la construcción de la fábrica se iniciará en 2024. Si todo sale según lo previsto, estará lista para entrar en funcionamiento en la última mitad de esta década, con una producción que irá en aumento de manera gradual (también en función de la demanda). Micron quiere utilizar un 100% de energía renovable en la fábrica, y planea depender de infraestructura verde en su construcción, además de dotar a la planta de características de edificación sostenible.