«Ninguna empresa pone el core de su negocio en la nube»

Fundada en 2007, Orizon es una compañía tecnológica única en su especie. Con una misión que pasa por detectar las ineficiencias en el software y la infraestructura tecnológica de las grandes empresas, han conseguido entrar por la puerta grande en entidades financieras, aseguradoras y retailers. En 2022 consiguió firmar una facturación cercana a los 3,5 millones de euros y prevé obtener una cifra de negocio de 8 millones de euros en 2023, llegando a los 30 millones de euros en 2024.

Para conseguirlo, entre sus objetivos se encuentran la conquista del mercado nacional, dar pasos hacia su internacionalización (principalmente en Europa) y seguir invirtiendo en el desarrollo de su herramienta, BOA, dotándola de nuevas capacidades de inteligencia artificial. Sobre todo esto, hemos tenido la oportunidad de charlar con Ángel Pineda (CEO de Orizon) y José Manuel Disco, su director general. Esto es lo que nos han contado.

[MCPRO] Presentadnos Orizon. ¿Cuál es el origen de a empresa y a qué se dedica?

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] Orizon es una compañía que va a cumplir 16 años y básicamente desde el inicio, estamos fundamentalmente orientados a mejorar el rendimiento de las estructuras tecnológicas a partir de la mejora del software.  

Nosotros nacimos en el entorno backend, en el entorno mainframe.  Y básicamente nos dimos cuenta de que la falta de calidad del software o lo mal hecho que está el software, tiene distintas consecuencias.  La primera es un sobrecoste de los entornos tecnológicos. La segunda, son problemas de deficiencia en el servicio que se traduce en el empeoramiento de los tiempos de respuesta o el incumplimiento de los acuerdos de nivel de servicio.  

Nosotros no hablamos de calidad del software con carácter genérico, ni hablamos de herramientas de calidad del software.  Nosotros analizamos el software en funcionamiento en un entorno real, en un entorno de producción para identificar mejoras en ambos aspectos.Y a partir de aquí, compartimos con nuestros clientes de qué forma pueden optimizar sus sistemas con nosotros, que a su vez, consiguen un retornos de su inversión en tres o cuatro meses, no más. De hecho, en algunos casos incluso menos tiempo, ya que las mejoras son espectaculares.

Inicialmente este trabajo lo desarrollamos en el mainframe, y ahora nos estamos trasladando también al entorno cloud, donde la problemática es mucho mayor como consecuencia de la propia complejidad del entorno y de la falta de control.

[MCPRO] Aunque los números de 2022 son similares a los de 2021, habéis crecido tanto en número de clientes como en la inversión en I+D que estáis haciendo. ¿Cuáles son los hitos que esperáis superar en 2023?

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] Pues el 2023 es un año en el cual lo que tenemos que hacer básicamente son dos cosas: la primera es crecer. Nosotros somos una compañía pequeñita todavía.  Pero bueno, es un mercado enorme y de hecho, ni siquiera está cuantificado como tal, aunque a nivel global podemos situarlo aproximadamente en los 55.000 millones de dólares.   

Por otro lado, nuestra competencia ahora mismo no está claramente identificada o mejor dicho, no está identificada de ninguna de las maneras. De hecho, como compañía de servicio no hemos identificado a ningún competidor.  Como compañía de software, sí que puede haber empresas que hacen cosas parecidas a lo que hacemos nosotros…y hay varias herramientas de monitorización en el mercado.

Pero nuestra ventaja es que nuestra capacidad de generación de información no sólo va destinada al CIO, sino también a niveles superiores dentro de la organización.  Es decir, cuando nosotros hablamos de ahorro al costes, lo convertimos en magnitud relevante no sólo para el CIO, sino también para el CEO. En España es verdad, que aproximadamente hay unos 100 clientes a los que nos podríamos dirigir, ya que trabajamos con empresas que gastan más de 500 millones de euros en todo lo que su IT. A nivel europeo, el potencial es de más de 12.000. Creemos que nuestro modelo de delivery nos permitiría acceder y servir a clientes a nivel europeo.

[MCPRO] ¿Os planteáis entonces una expansión europea en este año?

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] De momento vamos a hacer lo posible por ‘comernos’ el mercado nacional.  Y claro, vamos a intentar hacer algún pinito a nivel internacional,  pero el mercado nacional lo tenemos que dominar. Por eso reforzamos nuestra estructura comercial,  nuestra estructura de marketing el año pasado.  Es más importante crecer en estos momentos, que hacerlo internacionalmente, por lo que no planeamos este año acometer una internacionalización salvaje.

El otro reto que tenemos es mejorar nuestra herramienta, BOA. Es la que nos permite encontrar la “aguja en el pajar”, es decir: encontrar la ineficiencia en los millones de líneas de código que puede tener un cliente como un banco.Nos permite a partir de la información de los logs que obtenemos de los clientes,  identificar y cualificar las ineficiencias que existen.  

Y no solo eso, sino que para cada una de ellas decidimos si tiene sentido o no acometerla  en función del retorno de la inversión que se produce o del su impacto en el servicio.  Y aunque BOA es una herramienta que va muy bien, ya tiene ocho años, por lo que tenemos que actualizarla con más inteligencia artificial, o con microservicios, lo que es importante desde el punto de vista de la modularización de la aplicación. Además queremos que tenga más capacidades de absorción de datos, que nos permitan tratar muchos más logs, con mayor volumen,  y de una manera más desestructurada. Hasta el momentos nos hemos gastado 900.000 euros en la actualización y creemos que la inversión llegará hasta los tres millones y medio aproximadamente.

[MCPRO] ¿Estáis encontrando en España suficiente talento tecnológico para ese tamaño de inversión?  

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] El problema de España es, en nuestra humilde opinión,  primero, que no hay volumen de personas que trabajen en este tipo de tecnología.  Segundo, que esas personas dicen que saben tecnología, pero encontramos que su capacitación es extremadamente baja.  Tercero, que estamos en un mercado de presión, que convierte a España un poco en la India de Europa.  

Es decir, nuestro mercado de integración y de tecnología con carácter general  es un mercado dominado por el precio.  Y de hecho, el precio no remonta, especialmente en la integración de sistemas.  Cuarto, tenemos una base tecnológica que no está impulsada por las empresas.  Es decir, no hay empresas españolas de tecnología, lo que hay son multinacionales con base en España,  lo cual implica que siempre seremos mano de obra. 

Todo ello, lo que nos está produciendo es que encontrar talento sea muy difícil.  Encontrar talento de verdad, es decir, personas que verdaderamente sepan,  es aún más difícil.  Los precios a los cuales tenemos que contratar afectan a nuestros márgenes  y eso provoca básicamente dos problemas en una organización como la nuestra. Primero, buscamos constantemente gente. Tenemos graves problemas de retención,  aunque yo creo que la retención que tenemos en el horizonte va a ser buena. Y  tenemos que gastar mucho en formación  para dar la capacitación a la gente que eventualmente piensa que tiene,  pero que luego no tiene. 

[MCPRO] En 2022 habéis lanzado lo que consideráis que es el primer estándar de eficiencia de software del mercado, pensado para garantizar su comportamiento desde el punto de vista de costes como de funcionalidad. ¿Qué parámetros analiza y cómo funciona? Afirmáis que una buena eficiencia puede suponer un ahorro de hasta el 40% de los costes de TI. 

[Ángel Pineda – José Manuel Desco]Lo primero hay que destacar que el viaje al cloud se ha quedado a medio camino.  Ahora las entidades tienen costes dobles (los del on-premise y los del cloud), con servicios difíciles de medir. 

Nuestro estándar va precisamente a esto y cuantifica los costes de infraestructura  en función del servicio que da.  Del servicio que se da, nosotros medimos tiempo de respuesta, estabilidad,  cumplimiento del acuerdo de nivel de servicio, cuándo tengo que recibir un dato  y qué infraestructura necesito para tener ese servicio. Obviamente, si pongo la mitad de infraestructura que se necesita,  los servicios serán mucho peores. 

Gracias a Orizon, un CIO o un consejo asesor de tecnología, sabrá exactamente qué servicio da, cómo está posicionado en el mercado, y qué coste tiene eso relacionado con la infraestructura que tiene o con lo que está invirtiendo. Todo eso lo mide BOA, que recibe muchas fuentes de información, sabe qué es lo que tiene que medir, cómo se mide ese coste, cómo es ese servicio y lo hace de forma constante. Entiende por qué ha empeorado por ejemplo el servicio, o por qué han subido los costes, en qué línea de código o base de datos concreta, etc. 

La competencia proporciona métricas, pero no aborda en profundidad cómo medir todas estas cosas, sino que se limita a arrojar indicadores que hay que saber interpretar. En ese sentido, creemos que nosotros damos un paso más. Porque nosotros somos capaces de procesar esa información, facilitamos esa toma de decisiones y generamos un dashboard que realmente es significativo para nuestros clientes. 

 [MCPRO] Uno de los objetivos de la nueva versión que vais a hacer de la BOA es introducir más inteligencia artificial.  Ahora mismo, ¿con qué tipo de IA trabaja y cuál es el objetivo de la nueva IA  o de los nuevos algoritmos que vais a introducir?  

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] La primera versión de inteligencia que hemos creado  es una inteligencia donde podemos hacer cálculos  muy complejos de datos de muchas fuentes  muy desestructurados  y tener una cierta previsibilidad  o una cierta detección de anomalías.  

Pero es verdad que es una IA con una capacidad de aprendizaje aún bajo  y muy centrada en el conocimiento,  en una automatización fuerte.  En la nueva BOA, cuando hablamos de un modelo de medición  de costes, lo que queremos ofrecer también al CIO es poder disponer de capacidad de predicción.  Es decir, un modelo que le permita anticiparse  y que le permita cuantificar lo grave que va a ser su incremento de costes o su degradación del servicio si no introduce cambios o corrige su infraestructura de TI a tiempo.

Esto es algo que ya podemos hacer en parte porque procesamos muchísima información, pero queremos avanzar hacia ese modelo de predicción de hacia dónde va a ir mi capacidad, cómo se va a comportar mi servicio en un futuro… queremos ser más eficientes y más eficaces a la hora de explotar toda esa información. 

[MCPRO] Uno de los temas que se han repetido a lo largo de esta entrevista es que el viaje a la nube para muchas empresas no ha sido precisamente sencillo… más bien lo contrario: no ha estado exento de complejidad. ¿Hay arrepentimiento?

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] La visión del cloud yo creo que tiene  para nosotros una visión tecnológica,  una visión financiera y una visión de mercado.  Desde el punto de vista de mercado, tradicionalmente se ha acusado IBM de ejercer un monopolio.  Y de hecho, IBM sigue subiendo  los precios del mainframe. Pero también es cierto que ese monopolio  ahora se ha sido sustituido por un oligopolio en el cloud que, desde el punto de vista de mercado no es saludable. 

Desde el punto de vista financiero muchos de nuestros clientes  dicen que tienen un cloud, pero no es del todo cierto.  Lo que tienen son modelos de provisión de servicios, en lo que se llama cloud privadas,  que no dejan de ser un data center,  una infraestructura tecnológica y un modelo de pago por uso. Pero eso no es cloud. Eso es otra cosa totalmente distinta. Se ve como cloud, pero no es cloud.  Porque no hay arquitectura ni nada detrás. La parte que sí es cloud pública nunca es su cloud principal, siempre son satélites. 

Pueden afirmar que están en cloud, pero siempre son cosas pequeñas (en la cloud pública), nadie pone el core de su negocio en la nube, entre otras cosas porque en sectores como el bancario está prohibido. Ahora se habla mucho del cloud híbrido, ¿pero qué significa en realidad? Básicamente, que tengo satélites y cosas menores en la cloud pública, un modelo financiero en mi cloud privada y que mantengo mis sistemas críticos on-premises. 

Y sí, la cloud pública está muy bien cuando eres una entidad pequeñita y no tienes que hacer inversiones millonarias para arrancar, pero no tanto en nuestro entorno de grandes clientes como el nuestro. Por otro lado en la parte tecnológica, ya hay informes de Gartner que dicen que el 70%  de CIOs mundiales entrevistados afirman que los costes del cloud  están subestimados.  Se están gastando mucho más  de lo que pensaban que se iban a gastar. En primer lugar, porque los clientes tienen problemas de RRHH para gestionar su cloud; también porque no es verdad esa promesa que hacen los vendedores de “te voy a bajar el coste”, ya que cuando empiezan a meter cosas, la curva de gasto se dispara. Son entornos que son mucho más difíciles de gestionar, más heterogeneos…y todo ello hace que cada vez haya más clientes que no solo se plantean no ir más al cloud, sino hacer un rollback. Las grandes organizaciones cada vez son menos propensas a sacar sus aplicaciones del mainframe y llevarlas al cloud.

[MCPRO] Contábais que en España teníais cien clientes potenciales, principalmente de banca,  seguros, utilities… ¿Tiene sentido en un modelo como el vuestro  ir a una empresa mediana a la que le puede interesar también optimizar sus costes y sus recursos?  

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] Sí que nos interesaría,  pero ahora mismo la realidad  es que la madurez del mercado  no es alta. En empresas grandes  hay más madurez. Los costes son grandes el servicio es importante y nuestros servicios tienen mucho valor añadido, en estas magnitudes.  

Cuando empezamos a ir a empresas más pequeñitas, es más importante  que no se caiga el sistema  que optimizar el coste y tener un servicio excelente. Es lo que nos hemos encontrado cuando hemos bajado  a un nivel inferior,  casi que pasamos a un nivel de formación continua y tenemos que  bajar a un nivel de operación pura y dura  en el mercado, lo cual no nos resulta tan rentable. Sus entornos tienen no ya sesenta años, sino como mucho ocho o diez años, son muy complejos y tienen una arquitectura heterodoxa donde todo el mundo toma decisiones, por lo que su preocupación pasa más por mantenerlo operativo que en optimizarlo.

[MCPRO] Habéis participado en la fusión de varias entidades bancarias. ¿Cuáles son los principales desafíos que habéis tenido que superar en estos procesos?

[Ángel Pineda – José Manuel Desco] Como consecuencia de la complejidad,  entornos híbridos, etcétera,  el cálculo de la capacidad  del uno más uno cuando hay una fusión  no es trivial, como era a lo mejor hace unos años. El cómo voy a poder dar servicio,  cómo me dimensiono en cuanto a capacidad,  qué servicio voy a prever dar en esta fusión,  eso se ha complejizado mucho.  

Eso es lo que nosotros hemos podido analizar con BOA. Cómo hacer una estimación futura y que, para que eso se produzca,  no solamente es una cuestión de infraestructura. El cálculo de la capacidad también depende  de la operación que tienes como consecuencia de la fusión, de cómo funcionan tus sistemas.  Y no funcionan igual algunos sistemas que están dimensionados para tres millones de clientes y que de repente  tienen que asumir diez millones de clientes.  Y eso hace que el cálculo de la capacidad y de toda la necesidad de mejorar el proceso, haga que ni siquiera con muchos más recursos tecnológicos puedas conseguir que algunas fusiones funciones de forma adecuada.  Ya no hablamos de sumar estructuras lineales, o de aplicaciones monolíticas, sino que se ha incrementado mucho esa complejidad.