La brecha digital sigue abierta: solo el 19,4% de especialistas TIC en España son mujeres

Aunque en los últimos años la brecha digital entre hombres y mujeres se ha conseguido reducir, dista todavía mucho de desaparecer. Lo ponen de manifiesto los datos del informe Brecha digital de género 2023, que acaba de publicar el ONTSI (Observatorio nacional de tecnología y sociedad).

Así, a la hora de utilizar Internet o teletrabajar casi no hay diferencias entre mujeres y hombres. Pero en otros aspectos y áreas, como la formación en disciplinas STEM o el trabajo como especialistas en TIC, las diferencias son muy acusadas todavía.

La brecha, en algunos casos, más que entre hombres y mujeres, se da entre grupos de edad. Así, en el caso de las mujeres de entre 16 y 74 años, el 92,8% usan Internet al menos una vez a la semana. Son solo un 0,3% menos que los hombres del mismo grupo que usan Internet semanalmente: un 93,1%. Son unas cifras que dejan a España con un 0,2% menos de la media de la UE en cuanto a uso semanal de la Red.

Una vez superados los 74 años, el porcentaje de hombres y mujeres que usan Internet desciende bruscamente. Más en el caso de las mujeres, ya que a partir de los 75 años solo lo han usado alguna vez el 39,7% de ellas, frente al 44,6% de los hombres. Semanalmente lo usan más los hombres (44,6%) que las mujeres (31,9%).

En el caso de los menores de 15 años, las niñas usan más el ordenador y el smartphone. Pero no sucede lo mismo con Internet. Los niños usan el ordenador un 92,9%, y las niñas en un 93,2% de los casos. Un 70,7% de las niñas tiene smartphones, frente al 68,4% de los niños. Mientras tanto, un 94,5% de las niñas usan Internet, frente a un 95,4% de los niños menores de 15 años.

Diferencias en el uso de Internet

La diferencia en el uso de Internet entre hombres y mujeres se da más en para qué lo usan unos y otras. Las mujeres lo usan más para actividades relacionadas con la salud que los hombres. Estos, por su parte, lo usan más para jugar a videojuegos y escuchar música que las mujeres.

El uso de Internet entre la población femenina se destina sobre todo a la comunicación, con la mensajería instantánea (92,5%) y el acceso a televisión o vídeos online (79,5) y el envío y recepción de emails (79,5) como actividades más comunes. Lo que menos hacen en Internet es vender bienes o servicios (18,9%), seguir cursos online (29,1%) y jugar (30,1%).

Por lo que respecta a las compras online, el 54,3% de mujeres compra bienes y objetos físicos a través de Internet, frente al 54% de los hombres. En cuanto a los servicios, los compran el 21,6% de mujeres, frente al 27,5% de hombres. En ambos casos, un punto porcentual por debajo de la media europea.

Las mujeres son además más conscientes de las situaciones de acoso que pueden sufrir a través de Internet. Aún así, el 70,3% de las víctimas de delitos relacionados con la sexualidad en Internet son mujeres. Un 80% de ellas creen que está bastante extendido, o mucho, el acoso a través de Internet. En el caso de los hombres, solo lo cree el 60%.

Educación en disciplinas STEM

Sólo el 17,8% de la población ocupada de España que tiene formación en áreas STEM son mujeres. Además, el porcentaje de mujeres en España con habilidades digitales que son menores que las consideradas como básicas es mayor que el de hombres: un 37,3%, frente al 34,3%. Un 62,7% de las mujeres españolas tienen competencias digitales básicas, un 3% menos que los hombres.

Eso sí, en comparación con la media de Europa, las mujeres españolas están un 10% por encima de las europeas, y la deferencia en cuanto a género es tres décimas más baja. Eso sí, en tres de las cinco áreas de competencias, los hombres con competencias por encima de las básicas superan a las mujeres. Sobre todo en creación de contenido digital y resolución de problemas. Las áreas en las que las mujeres superan a los hombres, y no por mucho, son las competencias de información y alfabetización digital, y de comunicación y colaboración.

La división entre hombres y mujeres aumenta en la educación superior. Así, sólo un 15,3% de las tituladas en informática a nivel universitario son mujeres. En 2020, en España solo había 12,3 mujeres de entre 20 y 29 años por cada millar de habitantes con una titulación superior de disciplinas STEM, frente a 29,2 graduados que son hombres. Además, las mujeres son una minoría en estudios universitarios de ingenierías e informática.

La brecha digital en cuanto a formación en STEM no es menor en estudios de formación profesional de informática. Las mujeres matriculadas y tituladas también son minoría. Sobre todo, en Formación profesional de grado medio. En este nivel, la mayor diferencia entre titulados hombres y mujeres están en el Grado medio de sistemas microinformáticos y redes. En él solo el 7,1% de quienes están matriculados son mujeres.

En el grado básico hay un 23% de matriculadas en informática de oficina, y un 14,2% en informática y comunicaciones. En cuanto al grado superior, solo el 9,2% de las matriculadas en Administracón de sistemas informáticos en red son mujeres. En Desarrollo de aplicaciones multiplataforma lo son el 9,8% del total, y en Desarrollo de aplicaciones web, el 13,6%.

En el trabajo también son minoría en España las mujeres especialistas TIC

La diferencia entre hombres y mujeres en el ámbito educativo en cuanto a formación en tecnologías de la información también se traslada al mundo del trabajo. Así, en 2021, solo el 19,4% de los especialistas en TIC eran mujeres, una décima más que el año anterior. Eso sí, aunque la cifra parezca baja, es un 0,3% más que la media europea. Con respecto al total de población ocupada, en España hay un 6,2% de especialistas en TIC, y solo un 1,7% son mujeres.

La brecha salarial por género en sectores relacionados con la tecnología enEspaña es del 8,6%. No obstante, España es el país de la UE en el que esta brecha es menor. La media, de hecho, está en el 19,3%. Además, el país tiene una puntuación de 54,2% en habilidades de especialista y empleo en Women in Digital, 5,6 puntos porcentuales más que la media de la unión europea. Esto hace que esté entre los países de mayor nivel: en novena plaza, un puesto por encima del que tenía el año anterior.

En lo que respecta al teletrabajo, eso sí, el total de mujeres que trabajan en remoto es mayor que el de hombres: un 15,9%, frente al 14,9% de hombres. Pasa lo mismo en el resto de la Unión Europea, donde la media de diferencia entre teletrabajo de hombres y mujeres es todavía más acusada, con 2,4 puntos porcentuales de diferencia. La posibilidad de contar con teletrabajo en España es más elevada para las mujeres, ya que el 68,8% de los hombres trabajan en puestos que no les dejan teletrabajar, frente al 65,1% de mujeres.