Pocos días después de que Broadcom la comprase, empiezan los despidos en VMware

Apenas hace una semana del cierre de la compra de VMware, justo después de que Broadcom consiguiese la aprobación de China para hacerlo, y ya van a comenzar los despidos en VMware. Según Business Insider, algunos empleados de la compañía ya han recibido un mensaje este mismo lunes en el que les comunicaban que sus puestos se eliminarán como resultado de la operación.

El correo que recibieron estos trabajadores les comunicaban, además de recordarles que Broadcom completó hace poco la compra de VMware, que «como parte del plan de integración, y siguiendo una valoración de necesidades organizativas, hemos identificado los puestos que a partir de ahora serán necesarios en la empresa combinada. Lamentamos informarle de que su puesto va a ser eliminado y perderá su empleo«.

En el mensaje también se dan las gracias a cada empleado que será despedido, asegurando que la empresa quiere «que esta transición sea lo más suave posible, y que incluya un paquete de indemnización generoso, además de ofrecer un periodo de aviso pagado sin trabajar«.

Por ahora es toda la información que hay sobre los despidos. Se desconoce a cuántos empleados de VMware afectarán, ni cuándo serán efectivos. Tampoco hay más detalles sobre la indemnización ni cómo afectarán los despidos a las plantillas de VMware en los países en los que tiene operaciones. Broadcom no ha ofrecido más datos.

En febrero pasado, VMware tenía más de 38.000 empleados, y ya había efectuado recortes de personal antes del cierre de su compra. Pero es probable que su plantilla esperase más recortes al hacerse efectiva la operación. VMware les envió una carta el pasado mes de septiembre en la que ya les anticiparon que, cuando les comprasen, Broadcom les ofrecería un empleo, les ofrecería un puesto de transición o les despedirían, con la consiguiente indemnización por ello.

Mientras tanto, varios empleados y directivos han ido saliendo de la empresa a lo largo del último año. Muchos porque pensaban que tendrían conflictos culturales con la forma de trabajar de Broadcom, que entre otras cosas ha llevado a obligar a los trabajadores a volver a la oficina y eliminar el teletrabajo. Otros se han ido por los rumores de externalización de distintos departamentos. Pero la mayoría ha seguido en su puesto, y muchos tendrán que enfrentarse ahora a un despido, que habrá que esperar para ver a cuántos afecta finalmente.