La inversión en infraestructura cloud compartida crece con fuerza, impulsada por el gasto en IA

La inversión en productos de infraestructura cloud de computación y almacenamiento, incluidos los destinados a entornos TI dedicados y compartidos, aumentó un 36,9% interanual en el primer trimestre de 2024, llegando hasta los 33.000 millones de dólares, según IDC.

El gasto en este área, por tanto, sigue superando a la que registra la infraestructura no destinada a la nube, que solo creció un 5,7% en el mismo periodo, quedándose en 13.900 millones de dólares. La infraestructura cloud, eso sí, experimentó un freno en su crecimiento en cuanto a demanda de unidades, debido al aumento de los precios medios de venta por un precio mayor de las ventas de GPUs para servidores. En total, subió un 11,4%.

El crecimiento de la inversión en infraestructura cloud pública compartida aumentó un 43,9% interanual en el mismo periodo, subiendo hasta los 26.300 millones de dólares. La categoría de infraestructura cloud compartida sigue siendo la que registra un mayor porcentaje de inversión en comparación con la de los despliegues cloud privados dedicados y a la no destinada a la nube.

En los tres primeros meses de 2024, la nube compartida se llevó el 56,1% del total de la inversión en infraestructura. Mientras tanto, el área de inversión en infraestructura cloud dedicada creció un 15,3% interanual en dicho periodo, hasta los 6.700 millones de dólares.

Para lo que resta de 2024, IDC prevé que la inversión en infraestructura cloud suba un 26,1% con respecto a la de 2023, hasta llegar a los 138.300 millones de dólares. La dedicada a la infraestructura que no será para la nube mejorará un 8,4% hasta los 64.800 millones de dólares, y la de infraestructura cloud compartida lo hará un 30,4% hasta los 108.300 millones de dólares. La inversión en infraestructura cloud dedicada, por su parte, mejorará un 12,8% en 2024 hasta los 30.000 millones de dólares.

En el primer trimestre del año, los proveedores de servicios gastaron un 37,9% más que en el mismo periodo de 2023 en infraestructura: 32.200 millones de dólares. Esta cantidad es el 68,7% del total del mercado. En cuanto a los proveedores que no prestan servicios a terceros, como las empresas y las instituciones gubernamentales, mejoraron su inversión en este área un 5,8% interanual hasta los 14.700 millones.

Europa Occidental y MEA registraron un crecimiento en infraestructura cloud del 4% y del 5,3%, debido sobre todo a tensiones políticas que retrasaron planes de inversión. El resto de regiones crecieron por encima del 16%, y la única que registró caídas fue Latinoamérica, con un descenso del 2,8% en la inversión en este sector.

A largo plazo, IDC prevé que la inversión en infraestructura cloud crecerá anualmente un 14,3% hasta 2028, cuando alcanzará los 213.700 millones de dólares, las tres cuartas partes de lo invertido en infraestructura de almacenamiento y computación.

Juan Pablo Seminara, Director de investigación del área de Infraestructura para empresa de IDC, ha destacado que «el crecimiento de la inversión en infraestructura cloud sigue con el impulso de la explosión de las inversiones relacionadas con IA, que no solo afecta a los servidores sino que también está empezando a influir de forma positiva en el almacenamiento para empresas. Aunque todavía hay algo de precaución en el ámbito sociopolítico, ha quedado claro que los planes de inversión en IA no van a frenar en 2024 y que seguirán crecimiento a buen ritmo este año y el próximo. Además, la mejora de las previsiones económicas contribuye a una previsión muy positiva del gasto para 2024 y 2025, donde la inversión basada en la nube subirá a doble dígito«.