Atos pone fin a su crisis y nombra a su sexto CEO en tres años

Pocas empresas han tenido tantos cambios en su cúpula directiva como Atos en los últimos años. La multinacional francesa acaba de hacer público que Jean-Pierre Mustier es el nuevo CEO de la empresa, sustituyendo así a Paul Saleh en el cargo y convirtiéndose en el sexto CEO de la compañía en los últimos tres años.

Saleh ocupaba el puesto tan solo desde el pasado mes de enero, pero ha tomado la decisión de dejar su puesto con efecto inmediato. Mustier, que había dirigido con anterioridad el banco italiano Unicredit, preside a su vez la compañía gala desde octubre de 2023.

A su vez, Saleh que anteriormente fue director financiero de Atos, reemplazó a Yves Bernaert, quien solo había permanecido en este puesto durante poco más de un año. Antes de esto, cargo de CEO fue ocupado por Nourdine Bihmane, Philippe Oliva y Diane Galbe.

La compañía lleva años moviéndose en un terreno delicado y en los últimos tiempos está haciendo lo posible por reestructurar una deuda de 4.650 millones de euros, de los cuales 3.650 millones deben ser reembolsados antes de finales de 2025. Este mismo año un tribunal francés ha abierto un procedimiento de salvaguarda (ayudar a las empresas que enfrentan dificultades financieras significativas a reorganizarse y evitar la quiebra) como respuesta al plan de reestructuración propuesto por la empresa.

En este sentido, a principios de este mes, Atos acordó un paquete de rescate que permitiría a sus acreedores tomar el control del negocio, con bonos y deuda por valor de 3.100 millones de euros convertidos en acciones. Los acreedores también proporcionarán 1.680 millones en deuda nueva y 223 millones en nuevas acciones, un movimiento complejo que se materializó finalmente la semana pasada.

Con la mayoría de sus acreedores habiendo acordado el trato, el procedimiento abierto por el tribunal francés ayudará a garantizar que se pueda completar sin que Atos se enfrente más dificultades. Se ha fijado provisionalmente una audiencia para el próximo 15 de octubre para finalizar el acuerdo. Esto supondrá además que el valor de las acciones se diluirá significativamente, pero podría marcar el fin de años de turbulencias económicas en la que es una de las empresas tecnológicas más importantes de Francia.

Planes de rescate

En 2021, anunció que se dividiría en dos unidades de negocio separadas: Eviden y Tech Foundations, como parte de un plan de recuperación diseñado para devolver la empresa a la senda del crecimiento.

Eviden gestionaría la actividad de la firma en el cloud, ciberseguridad, datos y supercomputación, que se consideran áreas de crecimiento potencial, mientras que Tech Foundations supervisaría sus contratos de infraestructura gestionada legacy, menos rentables.

La idea inicial era que Eviden y Tech Foundations fueran negocios separados y cotizados en bolsa bajo el paraguas de Atos; sin embargo, ambos terminaron cotizando en Bolsa mientras la compañía intentaba hacer frente a su deuda.

Una adquisición planificada de Tech Foundations por el fondo de capital privado EPEI fracasó el año pasado, mientras que en marzo se confirmó que las conversaciones entre Atos y Airbus, que habrían visto a esta última comprar parte de Eviden por 1.800 millones, también se habían cancelado. Finalmente, un rescate anterior propuesto para la empresa, encabezado por el mayor accionista de la compañía, la consultora de TI Onepoint, decayó el pasado mes de junio.