Directivos de empresas están perdiendo la fe en la tecnología por la IA generativa

Durante décadas, la confianza en la tecnología ha llevado a un aumento de las capacidades y la sofisticación de las empresas de todo tipo, gracias a la adopción de arquitecturas cada vez más flexibles y personalizables, analítica avanzada o diversos aspectos de la Inteligencia Artificial y la IA generativa, haciendo que una gran mayoría de procesos estén definidos por software. Pero en los últimos meses, las empresas no acaban de ver las mejoras producto de la implementación de nuevas tecnologías, y sus directivos están un poco desencantados de las novedades que prometen. Esto ha llevado a que la confianza de los principales directivos de las empresas en la eficacia de los servicios básicos de TI sea alrededor de la mitad de lo que era hace una década.

Así lo ha reflejado un estudio del Instituto de Valor de Negocio de IBM, realizado entre 2.500 directivos de empresas y tecnología. Y la culpa no es, ni más ni menos, que de la IA generativa. A pesar de que la Inteligencia Artificial debería haber mejorado la situación en las empresas, la generativa solo ha empeorado la impresión de los directivos con respecto a la tecnología y su estado.

Al menos es lo que se desprende de las respuestas de los CIOs, CTOs y CDOs encuestados. Mientras que los responsables de TI están preparando a las empresas para la adopción acelerada de la IA generativa, el resto de directivos está registrando un descenso de confianza en la capacidad de sus equipos de TI para proporcionar servicios básicos.

Un 43% de los directivos de tecnología de la encuesta señalan que la preocupación sobre su infraestructura tecnológica ha aumentado por la IA generativa. Y un 47% de los directivos de negocio encuestado señala que su organización en cuanto a TI es efectiva en lo que respecta a servicios básicos. Es una caída notable frente al 69% que lo creían así en 2013.

Solo un 36% de los CEOs que han participado en el estudio ven a la tecnología como efectiva, frente al 64% que lo creían así en 2013. Los CFOs son los que dan un poco más de cancha a los departamentos de TI, con un 50% de aprobación de su efectividad, pero aún así son un 10% menos de los que lo creían en 2013.

¿A qué se debe este descontento? Para empezar, a que las expectativas de los responsables de las empresas ha crecido con respecto a lo que tiene que ofrecer la tecnología. Las empresas se apoyan cada vez más en ella para conseguir ventaja competitiva en un marco cada vez más centrado en lo digital e invadido por la IA. Además, los directivos entienden más de tecnología de lo que lo hacían sus colegas de hace una década.

Más cooperación entre TI y directivos para mejorar en IA generativa

Esta tendencia, además, va a seguir en aumento, dado que hay una generación entrando en las directivas que ha tenido presente a Internet durante prácticamente toda su vida. Esperan que todo ocurra con gran rapidez o que pueda solucionarse con agilidad a través de servicios online, y no siempre es así. Esto lleva a que los responsables y profesionales de TI deban ser al mismo tiempo, según los autores del estudio, tanto expertos como profesores, diseñando estrategias de tecnología que engloben datos, seguridad, operaciones e infraestructura; además de ser capaces de ponerse en el lugar de los responsables de negocio hablando en un lenguaje que comprendan, no ser demasiado técnicos al hablar, identificar riesgos, imaginar posibilidades y coordinar inversiones.

A pesar de esto parece que hay poca comunicación y colaboración entre los responsables de negocio y de TI. Sólo un 39% de los directivos de tecnología dicen que colaboran con el departamento de finanzas para integrar las métricas de tecnología en casos de negocio. Y un 35% de los CFOs encuestados aseguraron estar implicados desde las primeras etapas de la planificación de TI para establecer expectativas estratégicas.

Para los autores del estudio, los responsables y profesionales de tecnología necesitan, en la actualidad, ver más allá de los recursos de computación y de la integración. Apuntan que tienen que crear equipos multidisciplinares para dar vida a la estrategia y fomentar la experimentación. Además, la tecnología debe ser parte del pensamiento estratégico necesario en las empresas.

Un 43% de los directivos, de hecho, están preocupados de si cuentan con la infraestructura adecuada para utilizar la IA generativa, y en los próximos dos años, esperan que la mitad de su puesto se vaya entre la IA y la nube híbrida.

Entre las sugerencias de los autores del estudio para que las empresas puedan mejorar la oferta de servicios TI a las empresas están el aumento de la presencia de mujeres en IA y en general en tecnología, debido a que es necesario hacer crecer el talento, además de conseguir más perspectivas críticas, y en el caso de la IA generativa, evitar el sesgo en un sector históricamente dominado por los hombres.

También creen que deberían convertir en prioridad de negocio la compensación de la deuda técnica, y utilizar la IA para mejorar su desarrollo, empleando asistentes de código para modernizar las aplicaciones. También optimizar la infraestructura para prepararla para la IA.

Medir continuamente el impacto de la tecnología en los resultados de negocio debe ser otro de los imperativos, así como hablar de los resultados y no de los datos. Por supuesto, implicar en todo esto a la plantilla de las empresas al completo. Sobre todo, mejorando su formación y también a la hora de definir cómo utilizan la IA, con el objetivo de que esta les ayude a trabajar mejor y más rápido.