Teresa Ribera, Vicepresidenta de la Comisión Europea con carteras de Competencia y Transición Verde

La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha elegido como Vicepresidenta de la Comisión Europea, con las carteras de Competencia y Transición Verde, a la española Teresa Ribera, actual Vicepresidenta Primera del Gobierno de España, y Ministra de Transición Ecológica. Ribera, del PSOE, será desde noviembre, si todo sale según lo planeado por Von der Leyen la política con más poder de los socialistas en Europa, y la número dos de la Comisión Europea, dado que será, su «primera Vicepresidenta ejecutiva«.

Teresa Ribera será, entre otras cosas, la «responsable de que haya una transición limpia, justa y competitiva«, según Von der Layen, y «también será responsable de las políticas de competencia. Guiará el trabajo a realizar para asegurar que Europa sigue el camino hacia sus objetivos fijados en el Acuerdo Verde«. Como todos los comisarios designados para formar parte de la próxima Comisión Europea, tendrá que superar una audiencia de confirmación en el Parlamento Europeo.

Ribera ha sido nombrada durante dos legislaturas Ministra de Transición Ecológica del Gobierno de España. En su segunda legislatura, ha ocupado además la Vicepresidencia Primera del Gobierno, tras la salida hace unos meses de Nadia Calviño del ejecutivo para ocupar la vicepresidencia del Banco Europeo de Inversiones.

Durante sus dos etapas, Teresa Ribera ha supervisado el cierre gradual del sector del carbón en España, ha negociado el cierre de las centrales nucleares del país entre 2027 y 2035, postuló como voluntaria a Madrid para albergar la Cumbre del Clima en 2019 tras la retirada de Chile de la candidatura en el último minuto y consiguió negociar con éxito un acuerdo diferenciado para el cálculo de los precios de la electricidad en España y Portugal con respecto al resto de Europa durante la pasada crisis del gas.

Además de su trabajo en el ministerio, Teresa Rubera ha centrado su trabajo durante la mayor parte de su carrera en políticas relacionadas con el cambio climático, tanto como funcionaria como negociadora sobre el tema. También como Directora del think tank parisino Instituto para el Desarrollo Sostenible y las Relaciones Internacionales. Por tanto, cuenta con un currículum con bastante experiencia en temas relacionados con la ecología y la energía.

Pero además, heredará de la Comisaria Margrethe Vestager la cartera de Competencias, en la que entre otras cosas tendrá que ocuparse de vigilar que las grandes tecnológicas, así como los bancos, líneas aéreas u operadoras de telecomunicaciones, entre otras grandes de distintos sectores, cumplan las normativas de libre competencia en la UE. Pero también, según Reuters, tendrá que gestionar las peticiones de unas normas menos rígidas para ayudar a que haya grandes tecnológicas europeas.

La española, de 55 años, será responsable de la aprobación o el veto a fusiones y compras de miles de millones de euros. También de imponer multas a las empresas que quieran conseguir más poder y cuota de mercado perjudicando a rivales más pequeños, o aliándose con otras para pactar precios.

Uno de sus principales desafíos será asegurarse de que las grandes multinacionales tecnológicas (Apple, Amazon, Alphabet con Google, Microsoft o Meta) cumplen las leyes aprobadas en la zona, que buscan reducir su poder y facilitar a los consumidores más posibilidades de elección. Ya hay varias con problemas serios, aparte de por haber recibido multas en las últimas semanas, por al parecer no haber hecho todo lo posible para cumplir con la DMA (Ley de mercados digitales).

Otra de las complicaciones para Ribera será abordar la cada vez mayor popularidad de la IA, en medio de crecientes preocupaciones porque las grandes plataformas tecnológicas aprovechen su dominio. Ribera puede incluso abordar con más mano dura que Vestager las medidas para evitar que compañías extranjeras compren empresas de la UE, o que compañías ajenas a los países miembros tomen parte en ofertas públicas abiertas por la UE con un apoyo estatal injusto.

Habrá que esperar a ver qué actitud toma Ribera frente a las grandes tecnológicas, aunque las decisiones más recientes del más alto tribunal europeo con respecto a las multas impuestas por la Comisión a Apple y Google por prácticas monopolíticas, pueden inclinar a Teresa Ribera a seguir con la mano dura hacia ellas. No tendría por tanto ninguna prisa para relajarlas.

También podría tener en cuenta el aviso que dio hace unos días Mario Draghi, apostando por dar un empujón a las grandes empresas europeas de distintos sectores para que puedan competir con otras de China y Estados Unidos. Por ahora tocará esperar para ver si su línea de acción sigue los pasos de su predecesora en competencia, toma medidas más duras, o por el contrario apuesta por relajar la normativa vigente.