Cisco vuelve al ruedo

“Cisco aumenta a su nivel más alto en 17 años en perspectiva de ganancias alcistas”, leo en mi terminal Bloomberg de un analista de Wall Street. Resulta que el 15 de febrero de 2018 sus ingresos aumentaron, por primera vez en ocho trimestres, a 11.900 millones de dólares.

Cisco Systems Inc. consiguió un nivel máximo en 17 años en Bolsa, toda vez que la empresa que transporta la mayor parte de los datos de internet del mundo arrojara un pronóstico alcista de ventas y ganancias.

«Realmente hemos revitalizado el negocio principal de redes», oí decir al presidente ejecutivo, Chuck Robbins, en una entrevista en Bloomberg, desde España y en tiempo real (jueves, 15 de febrero, por la tarde). «Claramente, la economía es alentadora. Hay mucho optimismo». Supongo que Trump estará contento con esas declaraciones…

Robbins está mermando la dependencia de Cisco del mercado, cada vez más reducido, de hardware de alto precio y centrándose en el software y los servicios que administran y protegen las redes. Los nuevos productos que se adaptan mejor a las necesidades cambiantes de los clientes, más una economía más fuerte, están impulsando sus ventas.

Los ingresos en el trimestre actual subirán hasta un 5% con respecto al año anterior. Eso indica ventas de hasta 12.500 millones de dólares, en comparación con una estimación promedio de los analistas de 12.100 millones.

El «retorno al crecimiento de Cisco ya no está en el horizonte: ha llegado«, dijo el consenso de analistas e inversores de S&P, WSJ y Bloomberg. Los expertos añadieron que las perspectivas de la compañía para el crecimiento de los ingresos del tercer trimestre implican una «aceleración significativa».

Las acciones subieron un 7,8%, a 45.36 dólares, en las primeras horas de Wall Street (primera hora de la tarde en España). La acción no se ha negociado por encima de 45 dólares desde diciembre de 2000.

Crecimiento de la demanda

La demanda de conmutadores y enrutadores puede estar aumentando a medida que las empresas actualicen los equipos más antiguos. Los nuevos productos de Cisco ayudan a los clientes a controlar mejor el tráfico de datos, controlar el acceso de los usuarios y diagnosticar y solucionar problemas.

Cisco es una de las compañías más ricas en la industria de la tecnología. Lo digo desde la perspectiva de quien -como director general de una empresa consultora, tiene 50 clientes tecnológicos, conoce la empresa hace más de 20 años y, casualidades, tiene un amigo trabajando allí: Santiago Solanas, ex CEO de Sage Spain y hoy presidente de Cisco para Europa-. Off the record, él no sabe que estoy escribiendo este artículo y que, como siempre, le manifiesto mi admiración-. Lo bueno de Internet y sus audiencias es que, si bien Santiago Solanas no se enterará, sí lo harán -según Google Analytics- la audiencia de seis millones de personas que me siguen…, me lo dijo hoy su directora general para España, Fuencisla, y me dio una gran alegría…

Cisco tiene más de 70.000 millones de dólares en efectivo, la mayoría de los cuales obtuvo en el extranjero y los dejó allí, sin repatriarlos a Estados Unidos. La compañía ahora recuperará parte de ese dinero y destinará 25.000 millones de dólares adicionales a la recompra de acciones. Cisco asumió un cargo de 11.100 millones de dólares, fruto de la reforma financiera de Trump, como le ha pasado a otras grandes empresas TIC, lo que le genera una pérdida neta de 1.78 dólares por acción, en el segundo trimestre. Excluyendo algunos productos, Cisco ha reportado una ganancia de 63 centavos por acción, superando las estimaciones de los analistas de 59 centavos.

Las ventas aumentaron por primera vez en ocho trimestres a 11.900 millones de dólares en los tres meses que terminaron el 27 de enero, también por encima de las estimaciones.

Chuck Robbins está tratando de restaurar el crecimiento que una vez hizo de Cisco la compañía más grande en tecnología. Tengo en la cabeza a un muy joven John Chambers lanzando la compañía al mercado… Es un desafío fuerte, en medio de un cambio fundamental en la industria de redes, que está forzando a Cisco a adquirir nuevas habilidades y adaptar su modelo de negocio. La tecnología de las redes se está desplazando cada vez más hacia el control de software y la seguridad del flujo de datos y lejos del hardware de propósito fijo (terminología para frikis). Al mismo tiempo, algunos de los mayores compradores de equipos – propietarios de centros de datos cloud como Amazon Web Services de Amazon.com Inc. y Azure de Microsoft Corp. – están diseñando cada vez más su propio hardware, forzando a Cisco a aparecer con productos nuevos, más baratos y más flexibles que podrían interesarles.

Desglose por producto

Las plataformas de infraestructura, que incluyen los principales negocios de enrutadores de Cisco, obtuvieron ventas de 6.700 millones de dólares, un 2% más que el año anterior. Las aplicaciones, su unidad de productos de software y teleconferencia, aumentaron un 6%, hasta 1.200 millones. Las ventas relacionadas con la seguridad aumentaron un 6%, llegando a 558 millones de dólares.

Los ingresos diferidos en forma de software recurrente y suscripciones aumentaron un 36% respecto del año anterior, hasta los 5.500 millones. Los ejecutivos de la compañía lo señalan como el indicador clave de su desempeño futuro y su progreso hacia una menor dependencia del hardware.

John Chambers, acabo de ver una foto de él mientras escribo la tribuna, aparece ahora más mayor que hace 25 años…, pero su compañía vuelve a rejuvenecer, como la película de Cate Blanchett y Brad Pitt, “El curioso caso de Benjamin Button”.

Que Cisco vuelva al ruedo -aunque a mí no me gusten los toros- cortando orejas y rabo, es buena noticia para el sector TIC y para sus clientes. Cuando John Chambers y yo éramos jóvenes se decía que Cisco era líder del negocio del networking. Un cuarto de siglo más tarde, la compañía vuelve a situarse al frente de un mercado renovado y remozado, a la par que imprescindible.

Jorge Díaz-Cardiel. Socio director general de Advice Strategic Consultants. Economista, Sociólogo, Abogado, Historiador, Filósofo y Periodista. Ha sido Director General de Ipsos Public Affairs, Socio Director General de Brodeur Worldwide y de Porter Novelli International; director de ventas y marketing de Intel Corporation y Director de Relaciones con Inversores de Shandwick Consultants. Autor de más de mil de artículos de economía y relaciones internacionales, ha publicado una veintena de libros, como Las empresas y empresarios más exitosos; Innovación y éxito empresarial; El legado de Obama; Hillary Clinton versus Trump: el duelo del siglo; La victoria de América; Éxito con o sin crisis; Recuperación Económica y Grandes Empresas; Obama y el liderazgo pragmático, La Reinvención de Obama, Contexto Económico, Empresarial y Social de la Pyme en España, Digitalización y éxito Empresarial, Trump, año uno, entre otros. Es Premio Economía 1991 por las Cámaras de Comercio de España.