Comienza la carrera por el 6G: Nokia, Ericsson y SK Telecom quieren ser los primeros

No importa que en Europa apenas haya rastro de las nuevas redes 5G o que probablemente, haya que esperar como mínimo hasta el año 2020/2021 para que un número significativo de empresas y ciudadanos puedan comenzar a disfrutar de la nueva tecnología: la carrera por ser los primeros en desarrollar redes 6G ya ha comenzado.

Lo ha hecho, como no podía ser de otra forma, en Corea del Sur. El país asiático ha sido testigo esta semana de la firma de un acuerdo de colaboración entre la telco local SK Telecom, y las empresas europeas Nokia y Ericsson.

Las tres partes involucradas en este acuerdo se han comprometido a dos cosas fundamentales: la primera, a mejorar el rendimiento de la infraestructura 5G ya existente. La segunda, mucho más interesante, a comprometerse y empezar desde ya, las tareas de desarrollo e investigación de la nueva generación de redes 6G.

Como se detalla en The Korea Herald, las tres compañías comenzarán en las próximas semanas a estudiar los requerimientos técnicos que precisará la futura infraestructura de red. De la misma forma, también se pondrán en marcha los primeros trabajos de desarrollo de las tecnologías core business que impulsarán las nuevas plataformas. ¿Las más interesantes? Profundizar en sus capacidades de Inteligencia Artificial, limitar aún más la latencia y la integración de la tecnología Blockchain.

Esta noticia se produce pocos días después de que Samsung anunciase sus intenciones de invertir en el desarrollo de las futuras redes 6G, además de en el desarrollo de chips propios para dar respuesta a una tecnología que en cualquier caso, no aterrizará en el mercado hasta dentro de diez años.

A este respecto, desde SK Telecom explican que abren el «memorandum de entendimiento» firmado con Nokia y Ericsson a otras compañías que estén interesadas en desarrollar de forma conjunta el nuevo protocolo. No sería de extrañar por lo tanto, que siendo Samsung una compañía coreana, acabe por unir su firma a este acuerdo.

En un momento en el que haciéndose un harakiri, parte del mundo ha decidido dar la espalda a la tecnología 5G desarrollada por Huawei, ser los primeros y lanzarse al desarrollo temprano de la futura tecnología 6G tiene sentido. Sobre todo para unas compañías europeas que necesitan recuperar el protagonismo que en los últimos años han perdido frente a los gigantes asiáticos.