Rusia prohibirá la venta de tecnología sin software nacional preinstalado

El país que gobierna Vladímir Putin ha aprobado una nueva ley que obliga a las compañías tecnológicas a comercializar todos sus productos en Rusia con software local preinstalado, es decir, con software ruso. Esta imposición no es negociable, si no se cumple pueden afrontar una prohibición total de sus ventas.

No es la primera vez que Rusia se dirige contra las grandes tecnológicas. La vigilancia y el control se han vuelto cada vez más marcados en nuestro vecino de los Urales. La reciente ley de censura que han aprobado y que afecta a Internet es un claro ejemplo de ello, y esta otra ley centrada en el software nacional es otro ejemplo.

A simple vista podríamos pensar que Rusia quiere potenciar la adopción y la utilización de software local a través de esa ley, pero la realidad es que las herramientas y aplicaciones rusas son tan escasas que para algunos dispositivos ni siquiera existen soluciones realmente viables.

Oleg Nikolayev, uno de los responsables del proyecto de Ley aprobado, ha comentado que «quieren dar más opciones a los consumidores rusos». Esto está muy bien, pero como hemos dicho anteriormente, ¿qué ocurre si no tienes realmente una alternativa que ofrecerles? ¿Y si esta existe pero es de una calidad tan baja que no es viable?

Esas dos preguntas, unidas al descontento y a la desconfianza general que ha surgido tras la aprobación de esta ley han generado una oleada de críticas que acusan al gobierno ruso de intentar colar puertas traseras en todos los dispositivos y productos tecnológicos que se vendan en Rusia, todo con el objetivo de espiar y controlar a sus ciudadanos.

Viendo los argumentos del gobierno ruso desde luego no se trata de una simple paranoia, hay razones de sobra para inclinarse a favor de esa opción, hacia la idea de un Estado ruso de vigilancia y control absoluto a través de la tecnología.

Apple es una de las compañías más afectadas por esta nueva ley, ya que la preinstalación de aplicaciones de terceros en sistemas operativos como iOS, por ejemplo, rompe una importante capa de seguridad de dicho sistema operativo y puede acabar teniendo consecuencias muy graves. Veremos cómo evoluciona la situación a partir de ahora, pero es probable que más de un grande opte por abandonar el mercado ruso si no se suavizan las exigencias de esta ley.