El suministro de PCs cae con fuerza a pesar del aumento de la demanda por el COVID-19

El suministro de PCs a nivel mundial cayó con fuerza en el primer trimestre de 2020 según los datos de Canalys. Y ello a pesar del aumento de la demanda de máquinas clientes por el confinamiento para frenar el COVID-19.

La consultora calcula que los envíos de ordenadores personales en todo el mundo retrocedieron un 8%. Sería la mayor caída en un primer trimestre desde 2016. Los datos son paradójicos teniendo en cuenta otros informes como el de IDC que habla de aumento de venta de portátiles y tablets, pero pueden tener explicación.

Hay que tener en cuenta que la pandemia del nuevo coronavirus sacudió en primer lugar a China, la gran fábrica mundial de producción de componentes y equipos electrónicos, donde trabajan para todos los grandes fabricantes. Las instalaciones estuvieron cerradas varias semanas después del Año Nuevo Lunar y ello ha repercutido en la producción.

La consultora también señala la falta de stock de chips de Intel, algo que dura ya bastantes meses. «Los fabricantes de PCs comenzaron 2020 con un suministro limitado de procesadores Intel, causado por una transición fallida a los procesos de 10 nm. Esto se exacerbó cuando las fábricas en China no pudieron reabrir después de las vacaciones del Año Nuevo Lunar».

El resultado ha sido que máquinas clientes como portátiles y convertibles han volado de los estantes de los minoristas ante el aumento de trabajo en casa, enseñanza on-line y ocio electrónico en los hogares, pero la industria no ha sido capaz de cubrir la mayor demanda.

La buena noticia desde una perspectiva de ingresos, al menos a corto plazo, es que las grandes tecnológicas podrían haber registrado buenos resultados en el primer trimestre debido al aumento de precios de venta ante la alta demanda y la baja oferta.

Tendremos que esperar a datos de venta reales de equipos y componentes para conocerlo. Canalys no es optimista una vez pasado el primer boom de ventas por el confinamiento, pero la verdad es que es muy difícil pronosticar ventas para 2020 debido a la incertidumbre en la que se ha alojado la industria hasta que no se logre superar la pandemia del COVID-19.