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La demanda de VPN se disparó en marzo en todo el mundo
La crisis del coronavirus ha enviado a millones de trabajadores a desempeñar su labor desde su casa en muchos países del mundo. Esto ha disparado el consumo de internet, así como de diversos tipos de herramientas y aplicaciones. También de las redes privadas virtuales (VPN), que según Network World, han visto dispararse su demanda ya en las primeras semanas de confinamiento en muchos países.
Solo en Estados Unidos, según una investigación de la consultora de investigación y prueba de VPN británica Top10VPN.com, la demanda de VPNs subió un 41% entre el 13 y el 23 de marzo. El sector de las VPN ya era una industria en crecimiento antes de la pandemia, pero el cierre de muchos centros de trabajo ha precipitado su auge.
Estaba previsto que el mercado del VPN creciese un 12% interanual hasta 2026, cuando tendría un valor aproximado de 70 millones de dólares, según la encuesta Global Market Insights 2020. Pero es probable que estas cifran experimenten un aumento superior. El líder en uso de VPN va a seguir siendo Estados Unidos, con un 30% de la cuota total de mercado.
Finalizado marzo, la demanda de VPN sigue estando un 22% por encima de la que tenía antes de la pandemia, con un aumento significativo en su demanda en 75 países. De ellos, la mayor subida se ha dado en Egipto (24%), Eslovenia (169%) y Chile (149%). Los mayores aumentos sostenidos de la demanda, registrados durante al menos dos semanas seguidas, se han dado en Egipto (154%), Perú (119%) y Sudáfrica (105%). El 72% de usuarios de VPN en Estados Unidos y Reino Unido utilizan servicios de VPN gratuitos, y el 36% paga por usarlas.
Este crecimiento no es precisamente una sorpresa, aunque sí pueden provocarlas algunas de las razones que se dan para ello. En la encuesta que hemos mencionado, el 51% de encuestados en Estados Unidos y Reino Unido usan una VPN para proteger su privacidad en redes WiFi públicas. Otro 44% dijeron que las utilizaban para navegar por Internet de manera anónima. Un 37% las emplea para utilizar comunicaciones seguras, y un 20%, para acceder a contenidos de ocio y entretenimiento restringidos.
El uso de servicios de streaming se ha convertido en uno de los principales impulsores de las VPN. Sobre todo por dos razones: restricciones geográficas y por temas de copyright, o para conseguir una mejora de calidad de vídeo. Con una buena VPN, los usuarios notan menos interrupciones en el flujo. Y según varias estadísticas, a lo largo del mes pasado, la demanda global de VPN para acceder a servicios de streaming aumentó un 85%.
Otras de las razones esgrimidas para el uso de VPN no tienen mucho que ver con el trabajo: el 22% las usa para acceder a diversas webs, archivos y servicios cuando están en el trabajo, y el 21% para evitar el capado del ancho de banda por parte de su proveedor de conexión. Mientras, el 20% las utilizan para esconder su actividad de navegación del gobierno y otro 18% para tener acceso a contenidos y webs censuradas.
Como consecuencia de esto las VPN están experimentando sobrecarga de red y un aumento en la actividad maliciosa. Además, claro está, de tener que lidiar con un aumento repentino de usuarios que no esperaban. También afrontan un aumento de la actividad de los hackers, que buscan explotar los problemas de seguridad que puedan encontrar en ellos. Por eso es recomendable mantener las VPN parcheadas y utilizar autenticación en varios pasos y vigilar los logs en busca de actividades dudosas.
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