Noticias
China no cumplirá sus objetivos de fabricación nacional de semiconductores en 2025
En 2015, China puso en marcha un plan conocido como Made in China 2025, centrado sobre todo en conseguir un aumento notable de la producción de componentes y dispositivos tecnológicos en el país para dicho año. Sobre todo, en lo que respecta a los semiconductores. Las autoridades del país se fijaron unos objetivos muy ambiciosos, que en el caso de los semiconductores pasaban por conseguir que en 2025 se fabricasen en China el 70% de los semiconductores que necesita el país. Pero todo apunta a que no lo van a conseguir, y es posible que incluso se queden bastante cortos.
Así se desprende de las previsiones de la consultora IC Insights, que asegura que en 2024 China solo conseguirá fabricar de forma local el 21% de los semiconductores que usa. La consultora alega varias razones para ello, de las que una es que muchos de los fabricantes de semiconductores no chinos que operan en China.
Según diversos analistas de IC Insights, de los 19.500 millones que tenían de valor los semiconductores fabricados en China durante el pasado año 2019, las empresas con sede en China produjeron únicamente componentes por valor de 7.600 millones de dólares. Será solo, por tanto, el 6,1% del valor del mercado de circuitos integrados, que totaliza 124.600 millones de dólares, y el . Las empresas extranjeras con fábricas en China, entre las que están TSMC, SK Hynix, Samsung e Intel; produjeron el resto
En algunas áreas de la fabricación de semiconductores China está muy lejos de producir el 70% de sus necesidades en China. Un ejemplo de esto es la memoria DRAM, que según los analistas de IC Insights cuenta con una capacidad de producción en el país notablemente baja.
Así, «el primer proveedor de chips DRAM del país, Changxin Memory Technologies (CXMT), empezó a producir sus primeros módulos de DRAM en el último trimestre de 2019. Esta empresa tiene unos cuantos miles de empleados y un presupuesto para inversiones de unos 1.500 millones de dólares anuales. En contraste, Micron y SK Hynix tienen cada una unos 30.000 empleados y solo la división de memoria de Samsung tiene alrededor de 40.000. Lo que es más: en 2019, el capital combinado para inversión de Samsung, SK Hynix y Micron fue de 39.700 millones de dólares«.
Al hilo de estos datos, los analistas concluyen que «en la actualidad, China está poniendo buena cara al mal tiempo en lo que respecta a su capacidad futura en la industria de circuitos integrados, porque básicamente es imposible que China haga avances significativos para convertirse en autosuficiente en cuanto a sus necesidades en circuitos integrados, tanto los de memoria como lo que no lo son, en los próximos cinco años, y probablemente ni siquiera en los próximos 10 años«. Algunos sectores de la industria prevén un crecimiento, fundamentalmente a causa del 5G y el empuje de la memoria flash, pero otros sectores ven más problemas.
China quiere fabricar sus propios chips porque es consciente de la factura que puede pasarle estar dispuesta a disputas y guerras comerciales. Estas, como puede verse en la situación actual de Huawei, puede que complique las opciones para suministrar los componentes que necesita el país a las empresas locales. Pero de momento, los objetivos que se ha marcado para 2025 parecen lejos de alcanzarse, lo que deja al país a merced de los vaivenes del mercado internacional.
-
OpiniónHace 6 días
10 predicciones para los proveedores de servicios gestionados en 2025
-
NoticiasHace 6 días
AMD despedirá al 4% de su plantilla mientras se centra en IA y centros de datos
-
NoticiasHace 2 días
El Capitan es el nuevo superordenador más potente y rápido del mundo
-
NoticiasHace 6 días
La Comisión Europea multa a Meta con 798 millones por perjudicar a la competencia de Marketplace