Tesla patenta un sensor para evitar que los niños queden atrapados en el vehículo

Evitar que los niños queden atrapados en el vehículo y puedan fallecer a causa de un golpe de calor. Este es el objetivo de la nueva patente de Tesla, que quiere de esta forma poner fin a esos desgraciados y ocasionales incidentes provocados en la mayoría de los casos por un despiste por parte del conductor del automóvil. Y es que según datos de la National Highway Traffic Safety Administration citados por Tesla, hasta cincuenta niños fallecen en Estados Unidos por este motivo cada año.

La patente, que según Reuters ya ha sido enviada a la FCC para su aprobación, hace referencia a un dispositivo interactivo de detección de movimiento de corto alcance. Además de prevenir el abandono accidental de un niño en su interior, gracias a este dispositivo mejorarían los sistemas antirrobo de los vehículos de la marca.

Para ello el dispositivo funcionaría a modo de pequeño radar, emitiendo ondas de corto alcance que serían capaces de detectar los ocupantes del vehículo y su tamaño, pudiendo así diferenciar si son adultos o menores. Con esta información, asegura la marca, sus coches también podrían optimizar la forma en la que funciona el sistema de airbag en caso de accidente, así como la sujeción del cinturón de seguridad.

No es esta sin embargo la única ocasión en la que Tesla utiliza este tipo de sensores. Sus vehículos ya disponen de funciones como ”Dog Mode” que mantiene el coche a una temperatura confortable mientras la mascota espera a su dueño en el interior del coche, a la vez que indica a peatones y otros conductores que la vuelta del propietario es inminente.

Otras marcas como Nissan también cuentan con tecnología pensada para proteger a los más pequeños. En sus nuevos Pathfinder ha incluido sensores que detectan si la puerta trasera se ha abierto antes de iniciar un viaje. Si el conductor no la abre de nuevo una vez que ha aparcado, el claxon comenzará a sonar para avisarle de que tal vez, se olvida de un “paquete”.

De momento no está claro el tipo específico de sensor que se acabará instalando ni cuándo llegará a los automóviles de la marca y se espera que no sea hasta finales del mes de septiembre cuando la FCC tome una decisión sobre la nueva patente.