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7 consejos para elegir una workstation portátil

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En MuyComputerPRO hemos dedicado especial atención a las estaciones de trabajo portátiles en la últimas semanas. Además, y gracias a la colaboración de Mountain, tenemos en marcha un estudio sobre el segmento workstation en el que queremos sintetizar el panorama actual del sector.

En este artículo, intentamos resumir en siete consejos básicos los factores más importantes a la hora de adquirir una estación de trabajo portátil. Los lectores interesados pueden obtener más información en nuestra introducción a las workstation portátiles y revisando los análisis del laboratorio técnico.

1.- Define tus necesidades antes de elegir

Una workstation portátil es, ante todo, una herramienta de trabajo. Por ello, resulta fundamental tener muy clara su misión y la integración en nuestro flujo productivo habitual. No es lo mismo una máquina destinada a realizar demos a clientes que una estación de trabajo que va a estar editando vídeo 8 horas diarias.

2.- El diseño y la construcción sí son importantes

Aunque los productos orientados a entornos profesionales suelen dejar el componente estético en un segundo plano, variables como la calidad de construcción, los materiales utilizados, el sistema de refrigeración o la ergonomía son incluso más importantes que en los productos destinados al terreno doméstico. Hay que tener en cuenta que, normalmente, una estación de trabajo portátil se enfrenta a largas jornadas de trabajo (no siempre en un entorno ideal) ejecutando aplicaciones muy exigentes con el hardware.

3.- ¿Necesito una configuración personalizada?

Algunos fabricantes ofrecen la posibilidad de configurar a medida la workstation portáil, según nuestras necesidades. Así, si vamos a utilizar el equipo para tareas de cálculo pesadas puede ser interesante incorporar un procesador más potente o una GPU NVIDIA Quadro con soporte para CUDA. Otro ejemplo: trabajando con vídeo en alta definición es importante contar un gran cantidad de memoria RAM y un disco duro rápido. Como comentamos en nuestro artículo dedicado a las estaciones de trabajo clásicas, pensamos que es el software el que debe «marcar el camino» del hardware.

4.- Garantía y soporte técnico

Como cualquier herramienta de producción, una workstatión portátil supone una inversión que debe amortizarse con el uso. Para prevenir posibles problemas es muy importante adquirir el equipo a un fabricante que nos ofrezca un servicio de soporte y asistencia fiable, eficaz y lo más ágil posible. Algunas marcas ofrecen hasta 2 años de garantía de serie y la posibilidad de ampliarla uno más, una opción interesante para determinados escenarios de uso.

5.- ¿Merece la pena comprar el equipo a un fabricante conocido?

Basta dedicar un tiempo a consultar precios para darse cuenta de que existe una importante disparidad entre equipos con especificaciones técnicas muy similares en función del fabricante. En general, los fabricantes menos conocidos pueden ofrecer una relación calidad precio más competitiva y las marcas de reconocido prestigio cuentan con la confianza de los consumidores, su imagen consolidada y el soporte del canal de distribución.

Evidentemente no está en la misma situación el profesional que busca una workstation portátil para uso personalque la empresa que va a comprar 50 equipos para una nueva área de trabajo, donde el valor añadido de un gran fabricante sí se puede notar más.

6.- El software, clave para elegir el hardware

A la hora de elegir una estación de trabajo, es fundamental tener en cuenta qué software vamos a ejecutar. Si nuestras aplicaciones habituales tienen soporte para procesadores con varios núcleos o soportan aceleración por GPU dedicada puede ser interesante invertir algo más en mejorar estos componentes. En la misma línea, los programas que realizan muchos accesos al disco duro funcionarán mejor con un hardware de almacenamiento lo más rápido posible. Por ello, siempre es interesante «armar» la estación de trabajo en función del software para aprovechar mejor su potencial y amortizar la inversión cuanto antes.

 

7.- Una workstation portátil es más que una configuración potente

Aunque por razones obvias una estación de trabajo debe contar con componentes de última generación, queremos insistir en la importancia de diferenciar una workstation de un portátil de gama alta. Elementos como una fuente de alimentación potente, un sistema de refrigeración cuidado, las opciones de conectividad, el teclado o la posibilidad de ampliar el equipo a posteriori pueden marcar la diferencia en escenarios de máxima exigencia, hábitat natural de las máquinas protagonistas de este artículo.

Por ello pensamos que el precio final debe ser sólo un factor más a valorar antes de tomar la decisión de compra. El valor añadido de una asistencia personalizada, soporte técnico insitu o la posibilidad de probar la configuración con nuestros programas antes de realizar la inversión son algunos de los aspectos que deberían ser tenidos en cuenta antes de elegir el fabricante de nuestro workstation portátil.

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