Las empresas abrazan el low code: un 75% lo ven como tendencia que no pueden dejar pasar

La demanda de desarrolladores, disparada en los últimos meses, ha impulsado a las plataformas low code, despertando el interés de las empresas por ellas. Tanto que según un estudio del especialista en desarrollo low code Mendix, un 77% de empresas de seis países ya han adoptado el low code, y un 75% apuntan que es una tendencia que no pueden dejar pasar. Es más, aseguran que no pueden permitirse hacerlo.

Además, un 57% de los profesionales de TI encuestados para realizar el estudio apuntan que el número de empleados que se necesitan en las empresas para el desarrollo de software está subiendo, y un 76% califican la demanda actual de desarrolladores de «fiebre». Paralelamente, el coste del desarrollo de software está subiendo. Así lo creen el 61% de los encuestados, y dos tercios de los proyectos relacionados con el desarrollo están experimentando un retraso con respecto a sus fechas previstas. Además, en el 62% de las empresas estos retrasos, lejos de solucionarse, van en aumento.

Como consecuencia de ello, las empresas están buscando soluciones. Y el 64% de los profesionales de TI han recurrido al low code como una solución de desarrollo para solventar esta situación en cuando a desarrollo de software, con un 59% de proyectos que usan low code creados en colaboración entre los grupos de negocio y TI.

Además de contribuir a aligerar proyectos y deshacer cuellos de botella, el low code ofrece otros beneficios, que ya ven los encuestados para este informe. Un 20% de ello apuntan a más colaboración, menores costes y un desarrollo más rápido. En concreto, los proyectos con low code rebajan un 53% sus costes, y se desarrollan un 56% más rápido. Las apps de clientes desarrolladas con plataformas low code también han aumentado los ingresos del cliente. De media, lo han hecho un 58%.

Por otro lado, el low code también está animando a más gente a entrar en el campo de TI. En particular, los que cuentan con educación superior. También contribuyen a aumentar la diversidad de grupos de edad y étnicos en tecnología.