Toyota se mantiene como el mayor vendedor de coches, seguido de Volkswagen

Reuters ha compartido una interesante información que recoge cuáles fueron los jugadores más importantes dentro del mercado del automóvil el pasado año, y viendo los números podemos concluir que Toyota fue el ganador indiscutible.

La compañía japonesa registró un aumento en sus ventas, durante 2021, del 10,1%. Ese crecimiento fue fundamental para que Toyota pudiera mantenerse como el segundo mayor vendedor de coches del mundo en el pasado año. En concreto, sus ventas ascendieron a 10,5 millones de coches en 2021, una cantidad que incluye las ventas registradas por sus afiliados, Daihatsu Motors y Hino Motors.

Para poner en contexto ese resultado, tenemos que valorar los que obtuvieron otros grandes del sector. Por ejemplo, Volkswagen, cerró 2021 con unas ventas totales de 8,9 millones de automóviles, una cifra que representa una caída del 5% frente a 2020, y que se sitúa como la más baja que ha obtenido el gigante alemán en los últimos diez años.

Es importante tener en cuenta que los fabricantes de coches se han visto afectados en gran medida por la crisis de los semiconductores, una realidad que ha sido consecuencia directa de esa, cada vez mayor, vinculación entre motor y tecnología. Sin chips, es imposible fabricar la mayoría de los  automóviles modernos, y la escasez de semiconductores ha obligado a muchos gigantes del sector del automóvil a reducir su producción, algo que, obviamente, ha tenido un impacto considerable en las ventas.

Sin embargo, parece que los fabricantes japoneses han podido capear el temporal mejor que el resto de fabricantes porque, en resumen, sus mercados se han visto menos afectados por la crisis de los semiconductores que el mercado europeo. Con esto en mente, no es extraño que muchos grandes del automóvil en Europa hayan abogado por un acercamiento directo a la cadena de suministros en Asia para establecer vínculos y acuerdos más cercanos que, en caso de problemas, puedan ayudarles a salir mejor parados.

Volviendo a Toyota, la compañía japonesa ha confirmado que es probable que no sea capaz de alcanzar su objetivo de producir 9 millones de coches dentro del presente año fiscal, que finaliza el 31 de marzo de este año, debido precisamente a los problemas de suministro que se han producido por la COVID-19.