COBOL se prepara para resistir 25 años más

COBOL no solo es uno de los lenguajes de programación más longevos, sino que si hacemos caso a los datos de un estudio publicado esta semana por MicroFocus, todo parece apuntar a que a este «lenguaje obsoleto» aún le quedan varias décadas por delante.

Tal y como aseguran los investigadores que han participado en la elaboración de este documento, en estos momentos se contabilizarían más de 800.000 millones de líneas de COBOL que se están utilizando de forma activa por empresas y organizaciones de todo el mundo. Esta enorme cantidad de código, triplica las estimaciones que se hicieron en el estudio anterior y apunta a que este lenguaje, con más de 60 años a sus espaldas, sigue siendo lo suficientemente robusto como para inspirar confianza.

Para realizar la estimación de «cuánto COBOL» hay en el mundo, los investigadores han preguntado a 1.104 expertos de 49 países, llegando a la «sorprendente conclusión» de que para el 90% de las organizaciones encuestadas, COBOL sigue siendo una prioridad estratégica en su desarrollo tecnológico. Un 83% de las mismas considera además que sus aplicaciones basadas en este lenguaje, esperan tener una vida útil de por lo menos diez años más.

Más sorprendente aún resulta que casi la mitad de los encuestados afirman que esperaban que la cantidad de COBOL en uso en sus organizaciones aumente durante los próximos 12 meses.

En lugar de sustituir los antiguos sistemas heredados, el 64% de los encuestados afirmó que tenía la intención de modernizar sus aplicaciones COBOL, lo que crea una necesidad demostrable de inversión y modernización continuas en COBOL por parte de los nuevos desarrolladores, por lo que el de experto en este lenguaje va a seguir estando entre los perfiles más demandados de la industria.

COBOL -o Common Business Oriented Language- existe desde 1959 y se le atribuye en gran medida el mérito de haber contribuido a construir la industria del software informático tal y como la conocemos hoy.

Dominó los sistemas informáticos de empresas y gobiernos durante las décadas siguientes, y las grandes organizaciones siguen confiando en él para ejecutar sus mainframes y sistemas empresariales básicos, como las nóminas y la contabilidad.