Las mejores estrategias para retener el talento tecnológico

Las empresas españolas, al igual que las del resto del mundo, se enfrentan a un problema serio relacionado con la retención de talento. La fuga de empleados cualificados, y con la formación necesaria para realizar tareas completas, especialmente las relacionadas con TI, es un goteo que no cesa, y que tiene visos de empeorar a corto plazo. Según el estudio Personio de Recursos Humanos de 2024 realizado para pymes, un 47% de empleados están motivados para dejar su puesto de trabajo cuando mejore la economía, lo que según los expertos podría ocurrir en unos meses.

Este estudio, en el que solo en España han participado más de un millar de empleados (7.046 en total) y 500 responsables de Recursos Humanos de empresas de entre 10.000 y 20.000 empleados, refleja que un 44% de los trabajadores tiene previsto buscar un nuevo trabajo en los próximos 12 meses, independientemente de si la economía mejora, empeora o sigue igual que ahora.

No es ningún secreto para las empresas, ya que un 38% de los empleadores de España esperan que la rotación de trabajadores aumente de aquí a un año, y la cuarta parte espera más salidas. Se constata que seguir en la misma empresa durante una parte notable de la carrera profesional ya no es tendencia entre los trabajadores en España. En muchos casos, si no están satisfechos, sencillamente, buscan otro puesto en otra compañía.

Actualmente, el 45% de los empresarios están preocupados porque los empleados están menos comprometidos con las empresas que el año pasado. La falta de satisfacción en el trabajo es uno de los motivos que puede llevar a ello, así como al descenso en el nivel de retención del talento de las empresas. También un 45% de los trabajadores señala que el trabajo ya no es una prioridad en sus vidas, el mismo porcentaje de encuestados que señala que le gustaría cambiar de profesión o de sector.

Un 51% considera a la conciliación de la vida laboral y familiar una prioridad en su trabajo, porcentaje solo superado por el de empleados que dan prioridad a tener un buen salario o un buen bonus: un 65%. Tener un bajo nivel de estrés lo es para un 38%, mientras que una cultura de empresa agradable es importante para un 22%. Solo un 14% da importancia a dejar huella en la empresa.

Ante este panorama, los CIOs y responsables de TI tienen que tomar medidas para intentar retener el talento tecnológico con el que cuenten en la medida de lo posible. De otra forma, puede haber salidas de la compañía que tengan consecuencias negativas para la empresa. Entre ellas, una reducción notable de ingresos.

En el caso de los trabajadores que ocupen puestos relacionados con TI, a los motivos que hemos visto para buscar nuevos horizontes profesionales pueden añadirse otros más específicos de su trabajo. Se trata de un perfil de empleado complejo, que suele aburrirse con facilidad, especialmente si los proyectos tecnológicos en los que trabaja no le parecen atractivos ni le suponen un desafío.

También pueden sentirse aparte del resto de la empresa si esta destina un presupuesto bajo a TI, si hay peticiones y objetivos poco razonables para su departamento o si los responsables de la empresa no prestan la atención debida a todo lo relacionado con la tecnología de la empresa, y sus avances.

Estrategias para retener el talento de TI en las empresas

Lo primero que tienen que hacer las empresas para retener el talento de sus empleados que trabajan en TI es comprender sus necesidades y sus dificultades. Los CIOs deben demostrar que les valoran, y ser conscientes de que pueden estar atravesando momentos personales complicados, como sucede con enfermedades graves de familiares, que pueden afectar negativamente a su trabajo, y si no se gestiona bien la situación, puede derivar en conflictos entre compañeros o con la dirección de equipos.

También pueden mejorar las relaciones de los responsables de TI y los CIOs con sus subordinados, y entre los compañeros, para que mejore la comprensión de ciertas situaciones y también por lo que pueden estar pasando los demás. Las reuniones distendidas durante un rato en horarios de trabajo, o eventos de grupo fuera de la oficina que no impliquen gastar tiempo de descanso pueden ayudar a ello.

También es necesario incluir a los profesionales de TI, en la medida de lo posible, en la toma de decisiones. Muchos piensan que no se les tiene en cuenta en las más importantes, lo que les puede llevar a pensar que los responsables de la compañía les ven como profesionales de los que pueden prescindir sin problemas.

Por eso los CIOs deben compartir con ellos lo que está sucediendo en reuniones con los superiores siempre que puedan hacerlo, y evitar así que la información les llegue por otra parte, y a menudo sesgada. Claro está, siempre que no se trate de información confidencial o sensible. De esta manera, los profesionales de TI se sentirán más implicados.

Además, los directivos de alto nivel de la empresa deberían pedir la opción de la plantilla de TI sobre las decisiones críticas de negocio que afecten al lado tecnológico de la empresa. Así los trabajadores no solo se sentirán más implicados, sino que también se sentirán valorados.

Esto también puede ser beneficioso para los directivos, ya que los empleados de TI pueden compartir con ellos datos e información que no conocen, o que pueden haber pasado por alto en su momento. Es más, los responsables de las empresas deberían preguntar a los trabajadores de los equipos de TI su opinión en áreas que no impliquen directamente a su departamento. Los trabajadores sentirán que los directivos que contactan con los empleados e interactúan con ellos valoran sus contribuciones.

En cuanto a la formación de los trabajadores, a menudo se deja de lado por parte de la dirección de las empresas. Y es uno de los principales motivos de las dimisiones. Los directivos tienen que promover que sus empleados sigan formándose, que acudan a conferencias y participen en cursos, y darles tiempo para que se formen de manera autodidacta si así lo prefieren, con cursos a distancia o métodos similares.

Multitud de aspectos tecnológicos están en evolución continua, por lo que la formación y el desarrollo continuos son importantes tanto para los trabajadores como para sus empresas. Los CIOs, además, deberían valorar destinar una parte de su presupuesto a la formación continua. Cuando lo hagan, además, los CIOs deben asegurarse de que los empleados saben que existen estos fondos y que los utilizan.

Por supuesto, es necesario que los responsables de los departamentos de TI establezcan unos objetivos, y que colaboren y trabajen para que sus empleados cumplan determinados estándares que les ayuden a tener éxito profesional. Así serán más felices en el trabajo. Eso sí, deben ser objetivos realistas. Por eso, los responsables de grupos y departamentos deberían trabajar con Recursos Humanos para establecer estos estándares, con unas métricas claras.

Poner en marcha sistemas para medir la evolución de las plantillas y el talento TI facilitará también la dirección del trabajo de los empleados, ya. que sus responsables podrán ver con más claridad cómo han progresado sus subordinados. Y por supuesto, los CIOs deben demostrar que están abiertos a recibir comentarios de sus empleados. De otra manera, y sobre todo si sienten que tienen que alcanzar objetivos poco realistas, pueden abandonar la empresa.