Ya ha llegado el coche del futuro

La tecnología cambiará nuestras vidas, eso lo tenemos asumido. Si ya ha cambiado nuestra forma de comunicarnos ahora también cambiará nuestra forma de movernos. En el Mobile World Congress ya pudimos ver algunos ejemplos de cómo los coches están incorporando estas novedades en sus modelos.

Esta semana, en otra feria, en la Geneva Motor Show, Apple mostrará las novedades de su tecnología CarPlay. Una nueva versión de iOS diseñada para los sistemas de info-entretenimiento del automóvil. CarPlay se integrará en los sistemas de info-entretenimiento de los automóviles de referencia y con un gran protagonista, el asistente de voz Siri, que podrá activarse desde el volante para control de funciones de multimedia, llamadas o uso de los mapas. CarPlay está abierto a aplicaciones de terceros entre las que se ha citado Spotify.

Ferrari, Mercedes-Benz y Volvo serán los primeros fabricantes en integrar este sistema, seguidos por casi todos los grandes productores de automóviles: BMW, Ford, General Motors, Honda, Hyundai, Jaguar, Land Rover, Kia, Mitsubishi, Nissan, PSA Peugeot Citroën, Subaru, Suzuki y Toyota.

Pero más allá de Apple, son muchas las empresas que se están adentrando en la tecnología:

Alianza automovilística por la integración de Android

A principio de años Google anunció la OAA (la alianza automovilística abierta), en ella participan Audi, GM, Honda, Hyundai y Nvidia. Tienen como objetivo integrar en sus coches dispositivos Android, una tarea que Google está llevando a cabo junto con sus partners.

Más allá de esta promesa no hay ningún detalle sobre la fecha en las que se podrá ver alguna de estas novedades, pero se espera que en su conferencia de desarrolladores, que se celebrará el 25 de junio, se dé alguna información.

Qualcomm Gobi 9×30 con LTE

Se necesita un módem rápido para proporcionarle conectividad a un coche, y precisamente en esto es en lo que está trabajando Qualcomm. Están desarrollando un chipset que abrirá la puerta al uso del LTE-Advance. Gobi 9×30 implementará una tecnología que conseguiría una velocidad de 300 Mbps.

Nvidia Tegra K1

Cuando se tiene una conexión rápida a Internet todo parece más fácil. Pero tengamos en cuenta que los coches tienen que ofrecer todo esto en movimiento y en situaciones en las que el clima no es muy favorable y es aquí donde Nvidia Tegra K1 entra en juego.

Nvidia quiere ser el procesador utilizado en smartphones, tablets y coches. La primera versión de este sistema incorpora  un procesador quad-core en la última versión del ARM Cortex A15 CPU. Cuenta con cuatro procesadores principales que funcionan hasta los 2,3 GHz y con un quinto núcleo con optimización de energía para manejar tareas de bajo rendimiento y ayudar a disminuir el consumo de energía. Algo de vital importancia, ya que los fabricantes de automóviles también tienen que lidiar con el consumo de sus coches.

Con el K1, Nvidia está poniendo un énfasis especial en la mejora del juego, pero este procesador es lo suficientemente potente para funcionar en un sistema de asistencia avanzada al conductor que realice tareas como la detección de peatones, monitoreo del punto ciego, advertencia en el carril de salida, reconocimiento de señales. Según Nvidia, el K1 también será capaz de sentar las bases en la autoconducción de los coches. En esta línea se espera que los primeros dispositivos equipados con este procesador lleguen para la primera mitad del año.

La baza de las empresas automovilísticas

BMW Honeycomb, el renacer del coche

BMW no solo quiere rediseñar los coches, quiere que estos coches funcionen. Honeycomb (panal en inglés) es un nuevo concepto en el que los usuarios no compran un coche, el coche viene a recogerlos cuando lo necesitan, lo dejan en su destino y el coche se va. Algo así como el transporte público del futuro pero muy mejorado.

De igual manera que la industria de la música cambió con los servicios de suscripción como Spotify, también puede hacerlo la industria del automóvil. Si solo necesito un coche para ir a sitios puntuales, ¿para qué tengo que comprármelo?

Se trata de coches pequeños e individuales capaces de viajar solos y de venir a recogernos con solo llamarlos con el smartphone. Estos coches son tan pequeños que pueden viajar en grupo, un carril con cuatro coches.

Los BMW Honeycom serán totalmente autónomos y los usuarios solo tendrán que montarse como si de un taxi se tratara. Una vez que ha dejado al pasajero, el coche se dirige solo hacia su próximo destino o a cargarse, en caso de que lo necesite.

Aunque todo esto pueda parecer muy bonito (para los que no aman conducir) no es más que una idea, pero que si se piensa bien podría trastocar el mundo de la conducción como se conoce hasta ahora.

Volvo sin miedo

Aunque el CarPlay todavía no se ha presentado formalmente ya tiene un cliente. El lunes Volvo presentó un vídeo en el que se mostraba cómo funcionaba el CarPlay en uno de sus coches. Este software estará totalmente integrado en los nuevos modelos de Volvo y le ofrecerá a los usuarios la posibilidad de acceder a una interfaz similar a la del iPhone, que se puede manejar desde una pantalla táctil situada en el centro del salpicadero. Por el momento Volvo ya ofrece una interfaz similar al CarPlay.

El iPhone se conectará al coche a través del cable Lightning, aunque se estudia que en el futuro el coche pueda conectarse sin necesidad de cable.

Volkswagen, ¿demasiado futurista?

Si todavía las grandes marcas están pensando como implementar un software completo en sus coches, Volkswagen va más allá y ya está pensando en los coches voladores. Su nombre es Hover Car y se presentó en la pasada feria automotriz en Beijing. Obviamente, todavía es un proyecto conceptual, pero lo que Volkswagen quiere conseguir es un coche con  forma de una esfera aplanada sobre sus costados, está confeccionado a base de fibra de carbono, flota por los aires y se desliza a través de rieles electromagnéticos. Además, se maneja tan sólo con una palanca.

La lucha por el software

En los coches pasará como con los smartphone y los ordenadores la lucha por el software será encarnizada. Tengamos en cuenta algo muy sencillo: las actualizaciones. Cuando un coche tiene un pequeño fallo electrónico, por muy pequeño que sea, afecta a todo el automovil. Imaginemos ahora que nuestro coche incorpora un software completo, un software que tiene que actualizarse para cubrir fallos y añadir mejoras.

En el caso de Tesla, uno de los mayores fabricantes de coches inteligentes, ya tienen este problema solucionados, ellos actualizan el software con lo que ellos denominan «actualizaciones aéreas», que le permitió arreglar recientemente un trozo de software sin que hiciera falta que nadie llevara su coche al concesionario.

Por un lado conseguir que los coches se actualicen de forma automática sin necesidad de pasar por el concesionario supondría un gran ahorro para los fabricantes. «Las actualizaciones de software resultan muy caras si hay que llevar los coches a los concesionarios», explica el investigador del Instituto de Investigación en Transportes de la Universidad de Michigan (EEUU) Andre Weimerskirch.

Pero, a pesar de este ahorro, también tendrían que solucionar temas pendientes. Según cuentan en la MIT Technologie Review:

La mayoría de los fabricantes dependen de concesionarios independientes para vender sus coches. Y los concesionarios tienen buenos motivos para oponerse a unas actualizaciones automáticas que los sacarían de la ecuación. Los distribuidores autorizados consiguen una parte importante de sus ingresos del mantenimiento de los coches, según el profesor investigador en ingeniería automotriz de la Universidad Clemson, Joachim Taiber. Y que los conductores tengan que acudir al concesionario también sirve para vender más coches. Afirma que Tesla está más dispuesta a hacer actualizaciones automáticas en parte porque no trabaja con concesionarios independientes.

¿Tu coche es Android o iOS?

Siempre habrá algo en lo que discrepen y si ambos proveen de software a sus coches, no pienses que vas a poder disfrutar de los servicios de los dos. Parece raro, que con el batacazo tan enorme que se dio Apple en su servicio de mapas, quiera lanzarse de lleno en el software para automóviles. Una cosa es segura, si compramos el nuevo Volvo con CarPlay, no vamos a poder disfrutar de Google Maps.

Como hemos dicho, ambos trabajan en software paralelos que ofrecen el mismo servicio y sería difícil que colaboraran juntas.