Gestión del Rendimiento en Europa

Oracle ha presentado hoy su II Informe sobre la Situación de Soluciones de Gestión del Rendimiento en Europa (Enterprise Performance Management, EPM), que ha sido elaborado por el grupo analista Quocirca. El estudio revela que las compañías españolas son las que más han progresado en mejores prácticas empresariales, especialmente en las áreas de planificación y modelo de negocio.

El segundo Índice EPM pertenece a un contexto empresarial en el que existe una aceptación generalizada por parte de los departamentos financieros de que dependen de ellos para monitorizar el rendimiento de todas sus operaciones. Su misión es garantizar que la información fluya eficazmente desde la planificación a las operaciones y a los resultados.

Este área ha empleado 2009 en fijar los procesos y flujos de información que se habían quebrado, garantizando que los resultados de un departamento aporten su contribución a los del siguiente. Este estudio revela no sólo que las empresas aceptan que sus procesos clave deben estar integrados, sino que además saben mejor cómo hacerlo, aunque persistan ciertas áreas en las que el margen de mejora es aún alto, como el de atención al entorno de stakeholders.

La puntuación media obtenida por las organizaciones estudiadas ha dado un considerable salto en la excelencia de su gestión, concretamente un incremento del 38%. Este avance demuestra una sólida mejora en todos los países, sectores y empresas, independientemente de su tamaño, analizados en el informe.

Puntos destacados

– En líneas generales, las empresas han hecho un buen progreso en su búsqueda de excelencia en la gestión. La principal fuente de progreso está en el área
de planificación, puesto que los departamentos financieros han conseguido absorber una mejor comprensión de otras áreas de la empresa.

– Los incrementos proporcionalmente mayores respecto al primer Índice EPM se han producido en las áreas de plan de negocio (44%) y modelo de negocio (40%).

– El plan de negocio ha sido una de las áreas que más ha evolucionado, pasando de una puntuación por debajo de la media en el primer Índice EPM (5,01) a una puntuación por encima de la media (7,19) en este segundo.

– El foco sigue siendo más interno y a corto plazo que externo y estratégico. Así, la atención al entorno de stakeholders ha empeorado en relación al resto de
áreas y a la media global del Índice.

– Las empresas necesitan concentrarse en la mejora de la integración de los diversos procesos que intervienen la excelencia de gestión.

Buenas noticias: las empresas han mejorado su planificación

– El plan de negocio ha sido el aspecto que más ha avanzado. Como mejor resultado del Índice, demuestra que las empresas están prestando más atención a sus procesos de planificación de negocio, para hacer un mejor uso de los recursos disponibles.

– El modelo de mercado, "investigar antes de invertir", también ha mejorado. Se trata, en definitiva, de identificar las mejores oportunidades y capacidades distintivas para finalmente crear una ventaja competitiva.

– Relativo incremento en el foco sobre los resultados de negocio. En términos absolutos, el área de los resultados de negocio se ha convertido en la más fuerte, lo que podría reflejar la creciente presión para informar con solidez y consistencia sobre los resultados empresariales actualizados.
 

Malas noticias: las empresas siguen mirando demasiado para sí mismas y trabajan en silos

– El foco empresarial sobre los stakeholders, "ganar para ser sostenible", ha empeorado. Parece que persiste un foco excesivo sobre las cuestiones de negocio internas en los departamentos financieros de las organizaciones. Para una buena salud a largo plazo, una empresa debe solicitar las contribuciones de su entorno de stakeholders para impulsar el rendimiento del negocio (un aspecto a su vez clave para cumplir las expectativas de los accionistas).

– Es necesario un mayor foco sobre el modelo de negocio, "diseñar para decidir". De la relativa debilidad mostrada en el área de modelo de negocio, podríamos inferir que existe una creciente concienciación de que el negocio no ha funcionado tan bien como se había supuesto.

– Menos foco en la reactividad. Las operaciones de negocio, "analizar para ajustar", son también relativamente más débiles. Aunque se han realizado mejoras en la capacidad global de las organizaciones para reaccionar a las desviaciones sobre lo planificado, esta área tampoco ha mejorado mucho.

– No se han hecho progresos en la integración de procesos. En general, aunque cada área ha marcado una mejora respecto al anterior índice, la variación entre los índices ha subido ligeramente, lo que revela que el foco sobre la integración entre las distintas áreas del negocio sigue siendo pequeño.

Comportamiento por sectores.