Ericsson pierde a su CEO en plena crisis

Hans Vestberg, CEO de Ericsson, ha anunciado su dimisión con efecto inmediato, tal y como explica el fabricante sueco a través de un comunicado. El momento para abandonar su cargo al frente de la compañía europea de telecomunicaciones móviles no podría haber sido en un momento menos complicado, dado que a la crisis financiera su une la política, puesto que la firma tecnológica está siendo investigada en Estados Unidos.

Esto es debido a que Ericsson pierde a su CEO cuando la multinacional anunció hace unos días que sus ventas y beneficios habían vuelto a descender, por séptimo trimestre consecutivo. La presión o la falta de ideas para sacar a flote a la mercantil pueden situarse como las razones por las que Hans Vestberg abandona su cargo de Director General, puesto que ejercía desde el año 2010.

De esta forma, será Jan Frykhammar, el Director Financiero de Ericsson, quien ejerza las funciones de CEO de forma interina, mientras se encuentra un sustituto definitivo a Vestberg. Este movimiento provoca que el tesorero Carl Mellander se haga cargo del puesto de Director Financiero que deja temporalmente vacío Frykhammar.

Sin argumentar las razones de su dimisión, todo apunta que los malos resultados del segundo trimestre de Ericsson, donde sus beneficios han caído un 24%, hayan tomado la decisión por Hans Vestberg, que justificaba el descenso debido a la fuerte competencia y debilitamiento continuo de la demanda de los productos que desarrolla la empresa sueca.

Ericsson se ha visto forzada a promover un ahorro operativo para el año 2017, que supone una reducción de costes adicional que incluye despidos, que se añadirán a los 8.000 ya producidos. A su vez, Ericsson frenará su inversión en investigación y desarrollo. En total, la compañía espera ahorrar unos 6.200 millones de dólares en un año; para lo cual también han decidido realizar una modificación en su estructura, por lo que a principios de este mes se llevaron a cabo varios cambios en su directiva, donde la dimisión de su CEO no estaba en los planes iniciales de reestructuración, cuyo objetivo es frenar la pérdida de valor de la mercantil, que ya vale un tercio menos que hace un año.